La Asociación Mexicana de Jugadores de Juegos de Origen Prehispánico exigió al Gobierno del Distrito Federal la devolución inmediata del pasajuego de Balbuena, destruido por las autoridades capitalinas el 9 de julio pasado.

Este despojo, como lo llamó Cornelio Pérez, representante de los jugadores de pelota de la capital del país, viola además la Declaratoria de Patrimonio Cultural Intangible de los Juegos de Pelota de Origen Prehispánico que se publicó el 27 de octubre de 2008 en la Gaceta Oficial del DF y que fue signada por el jefe de gobierno, Marcelo Ebrard.

El pasajuego de Balbuena fue construido en 1950 en el deportivo Venustiano Carranza, según informó Cornelio Pérez. Durante casi 60 años se habilitaron en una superficie de 10 mil metros cuadrados cinco canchas especiales para el juego de pelota.

Dicho espacio fue destruido por el GDF , afirmó el representante de los jugadores, para instalar ahí un edificio de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal. Es responsabilidad del gobierno preservar el espacio que por años han ocupado los jugadores, concluyó.