El director de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de Estados Unidos, Gil Kerlikowske, visitó la unidad de hospitalización de los Centros de Integración Juvenil (CIJ) en Iztapalapa, una de las demarcaciones con más altos índices de delincuencia y consumo de drogas en la ciudad de México, donde conoció los tratamientos y programas de rehabilitación que se ofrecen.

Kerlikowske –quien evitó dar declaraciones a la prensa– charló con muchos de los jóvenes en recuperación y aplaudió la labor de los CIJ, porque no sólo brindan tratamiento, sino que también previenen la delincuencia, pues las personas que ya no están involucradas con las drogas ya no tienen la necesidad ni el deseo de cometer crímenes en su comunidad.

En ese contexto, Carmen Fernández, directora de los CIJ, le informó que en México las drogas más consumidas son el alcohol y el tabaco, seguidas de mariguana, en tanto que en la década de los 90 se incrementó el consumo de cocaína y actualmente comienza a subir la demanda de metanfetaminas.

Red nacional de centros

Aseveró que los CIJ tienen una red nacional de atención de 110 sedes en todo el país: 98 centros de prevención y tratamiento, 10 unidades de internamiento y dos clínicas de atención a usuarios de heroína; a los que se suman 310 unidades de centros Nueva Vida para la detección temprana de adicciones.

Durante su visita a este sitio, el zar antidrogas estadunidense conversó con varios jóvenes que se encuentran en tratamiento, entre ellas una chica colombiana adicta a la denominada piedra, que realizaba en ese instante un dibujo y comentó que tiene una semana de haberse internado en el CIJ de Iztapalapa. Kerlikowske le pidió que no abandonara el tratamiento y la felicitó por la pintura que realizaba. Sin embargo, ese interés inicial del funcionario se esfumó cuando una decena de jóvenes que se encontraban en las canchas deportivas le solicitaron “una pícchur, míster”, a lo cual no obtuvieron respuesta del estadunidense.

Durante el recorrido, autoridades del CIJ explicaron a Kerlikowske el tipo de tratamiento que se ofrece, el cual inicia con terapias familiares e individuales y se complementa con actividades artísticas, manuales, educación y capacitación para el trabajo, a fin de evitar que recaigan.

La unidad de hospitalización Iztapalapa del CIJ es una de las 22 con las que esa agrupación cuenta en el Distrito Federal, y su importancia radica en que se ubica en una demarcación habitada por 1.8 millones de personas con nivel económico y social débil, que necesitan mayor educación y atención.

Este centro tiene capacidad para albergar a 24 varones y 12 mujeres, y desde su inauguración en febrero de 2007 ha atendido a 177 pacientes, 70 por ciento hombres y el resto mujeres; la mayoría de ellos (72 por ciento) de entre 14 y 29 años. Se informó además que las sustancias de mayor impacto que se han detectado entre los pacientes atendidos son el crack, con 30 por ciento; los inhalables con 23; 20 por ciento alcohólicos; mariguana 16 y cocaína con 18 por ciento.