La Comisión Permanente del Congreso de la Unión exhortó al Ejecutivo federal a que en su calidad de presidente pro tempore del Grupo de Río convoque a una reunión extraordinaria, a realizarse en la ciudad de México, para acordar en ella las medidas que permitan restablecer la vida democrática en Honduras y reinstalar a Manuel Zelaya como presidente constitucional de esa nación centroamericana.

La propuesta la formuló el PRD y fue respaldada por los demás grupos parlamentarios, luego de que la senadora Yeidckol Polevnsky argumentó sobre la gravedad del conflicto por el que atraviesa la hermana República de Honduras, donde la polarización se agrava día a día y amenaza con desatar una guerra civil, que podría extenderse por toda la región centroamericana.

Recordó que México ostenta la presidencia pro tempore del Grupo de Río, que es actualmente el mecanismo más representativo de América Latina y el Caribe, ya que ha probado su eficacia como foro de comunicación y consenso entre los jefes de Estado y de gobierno.

Por ello, recalcó que es urgente que los jefes de Estado y de gobierno de los países que integran el Grupo de Río se reúnan de forma urgente para propiciar una solución al conflicto hondureño.

Insistió en que el Grupo de Río ha contribuido decisivamente a fortalecer la capacidad de negociación dentro y fuera de América Latina y es el principal interlocutor con países y grupos de otras regiones geográficas.

Por ello, es urgente convocar a esa reunión extraordinaria, aquí en la ciudad de México, a fin de encauzar la restauración de la democracia en Honduras, mencionó.

La senadora Polevnsky hizo notar que el régimen golpista que encabeza Roberto Micheletti permanece ilegalmente en el poder desde el 28 junio pasado y en estos momentos mantiene entre retenes instalados en la frontera a quienes se oponen al gobierno de facto y pugnan por la reinstalación de Zelaya, sin permitir que se les haga llegar agua ni alimentos.

El llamado de la Comisión Permanente incluyó un llamado a todas las partes del conflicto en Honduras para el retorno a la legalidad y se hizo un llamado a la solución pacífica, ya que la ciudadanía es la que sufre por la violencia impuesta por los militares.