¡¿Cómo está México?! ¡¿Estamos vivos?!, lanzó el vocalista de Calle 13. Y a juzgar por el grito que se escuchó desde avenida Reforma, a la altura del Ángel de la Independencia, sí que estaban vivos.

A esa hora, nueve de la noche, más de 100 mil personas estaban en el concierto coordinado por el Gobierno del Distrito Federal y el sector privado para ayudar a reactivar el turismo en la ciudad, golpeado por la influenza y la crisis económica.

El nombre del concierto: Ciudad de México, llena de vida. De ahí el llamado de Calle 13.

Hasta ese momento de la jornada musical, esta banda de Puerto Rico fue la más coreada y aplaudida. Es más, este grupo, que mezcla ritmos urbanos y latinos, con letras inteligentes, o sea, que hace un hip hop latino combativo, fue el único al que le habían pedido otra y otra. Cosa que no se pudo porque los artistas tenían el tiempo medido, con unas tres canciones cada uno.

“Saludo a la gente del de-efe, de Tepoztlán, de Chiapas… que viva Latinoamérica unida, como Simón Bolívar soñó”, dijo el vocalista de Calle 13 al despedirse. Hasta ese momento, fue lo más rebelde que se dijo desde el escenario, donde más bien los comentarios giraron en torno a qué bonita y paseable es nuestra ciudad y qué bonitos eran los artistas. Todo bastante color de rosa.

Uno de los asistentes al concierto fue el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, quien agradeció de manera personal a los artistas nacionales e internacionales que se presentaron ante los capitalinos y con ello se solidarizaron con la ciudad de México para promover el turismo.

Antes de retirarse del lugar, el mandatario capitalino hizo un breve comentario en el sentido de que esa fiesta artística se enmarca en el acuerdo que después de la influenza hizo el gobierno de la ciudad con empresarios del ramo turístico para realizar actos de este tipo.

Indicó que este concierto, como otros más realizados, han permitido dar a conocer que la ciudad está bajo control y se puede visitar, por lo que continuarán esas actividades.

Durante el desarrollo del concierto, Benny Ibarra se presentó con su pop-rock de buena factura.

Antes, estuvieron en el escenario propuestas más comerciales, como la colombiana cumbia popera de Fanny Lú, el panameño reggaetonero Nigga, la popera oaxaqueña Nadia, quien fue producto de un reality show, el cuarteto mexicano Motel y Hot-Dog. También estuvieron el ranchero Pedro Fernández y el español David Bisbal.

Al cierre de esta edición, faltaba por subir al escenario el dominicano Juan Luis Guerra, con su bachata y merengue, y Wisin y Yandel. Estos últimos, a juzgar por los carteles y playeras, eran los más esperados de la noche. Cerca de la medianoche, y cuando el escenario era de los reggaetoneros, Protección Civil reportó una asistencia aproximada de 160 mil personas, y saldo blanco.