Tras dar a conocer un informe respecto al estado que guardan la presas que surten de agua a los habitantes de esta capital, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACM) informó que se avanza en la liberación de recursos del Fideicomiso 1928, necesarios para la contratación de obras hidráulicas, lo que permitirá atenuar el problema de la escasez del líquido.

Incluso –detalló la dependencia–, se tendría la autorización de poco más de 688 millones de pesos para las acciones de rehabilitación de 190 kilómetros de tuberías, la sustitución de 50 mil tomas domiciliarias, la automatización y mantenimiento de pozos, así como la ampliación de manantiales y la adquisición de destoconadoras y trituradoras para la sustitución de especies.

El Sistema de Aguas de la ciudad de México reiteró que a pesar de estar en plena temporada de lluvias, la falta de precipitaciones este año, y en particular en la última semana, ha impedido la recuperación de las presas del Sistema Cutzamala, las cuales incrementaron su nivel solamente en 0.706 millones de metros cúbicos, para alcanzar, al 3 de agosto, un almacenamiento total de 322.32 millones de metros cúbicos, que está por abajo del mínimo recomendado por el Comité Técnico de Operación de Obras Hidráulicas.

En este contexto, la secretaria de Desarrollo Rural de esta capital, Rosa Márquez, precisó que a consecuencia de la sequía que azota al Distrito Federal –la peor de los últimos 40 años– también está resultando afectada la producción de maíz, nopal y avena forrajera, que constituyen 60 por ciento de la extensión cultivable de toda la ciudad de México.

Acciones en marcha

Durante la presentación del Plan para la Promoción de la Agricultura Urbana, la funcionaria expresó que la falta de lluvias en la zona rural de esta capital ha ocasionado que los productores de maíz estén ya en la idea de que no tendrán la cosecha esperada.

Frente a esa situación, dijo, se analizan las acciones más eficaces que permitan a los campesinos del Distrito Federal recuperar lo más que se pueda de sus siembras, a la vez que se han construido ollas de captación, muros vivos y terráceos para contar por el agua necesaria para sus tierras.

Mientras, en la Universidad Autónoma Metropolitana se empezó la construcción de un pozo de infiltración para evitar inundaciones y reutilizar el agua de lluvia, lo que permitió también comprobar que en zonas de suelo basáltico se pueden realizar esas excavaciones y no sólo en la parte alta del Distrito Federal.

El rector de esa institución, Oscar Monroy, dijo que en coordinación con autoridades de la delegación Iztapalapa realizan el proyecto, que estará a cargo de académicos y personal de obras de la jurisdicción.