Mañana cumplirá Aviacsa un mes fuera del aire con al menos cuatro flancos abiertos: pérdidas por aproximadamente 300 millones de pesos, nulos avances en los juicios que enfrenta contra el gobierno federal, un adeudo fiscal por 292 millones de pesos, y otro por 150 millones por consumo de combustible, mientras cerca de 3 mil empleados esperan que de un momento a otro la empresa logre obtener un crédito que le ayude a salir de la severa crisis financiera que enfrenta o una alianza con un socio estratégico que está en puerta.

Por lo pronto, dijo la subdirectora jurídica de Aviacsa, Haydeé Córdova, este miércoles los trabajadores harán una manifestación de agradecimiento frente al Senado. Ahí, por gestión de los legisladores, habrá una reunión con el subsecretario de Transporte, Humberto Treviño, mientras en la Secretaría del Trabajo habrá otro encuentro para tratar de resolver el conflicto.

Las cosas no han avanzado con la velocidad que quisiéramos, la empresa enfrenta una crisis financiera muy severa, pero se han empezado a abrir canales de negociación con el gobierno federal y con financieros, lo que nos llena de optimismo, señaló la abogada.

Los ingresos de la empresa son casi nulos, sólo se han registrado algunos por concepto de servicios a terceros, que han hecho posible mantener el pago de nómina y otros gastos mínimos de operación, explicó Haydeé Córdova. Necesitamos créditos como los que se concedieron a otras aerolíneas, sobre lo cual no hay gran avance, pero sí sobre otro medio de financiamiento.

El panorama, dijo, se observa más optimista a partir de esta semana, debido a que por gestiones de senadores de los partidos de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional habrá una reunión con el subsecretario de Transporte y con la Secretaría del Trabajo.

Mientras tanto, en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) la postura es inamovible. No se puede determinar la aeronavegabilidad de la flota de Aviacsa hasta que no se destrabe el conflicto en los juzgados; el Servicio de Administración Tributaria (SAT) sostiene su requerimiento de pago, y Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) está por hacer efectivas la garantías que la empresa dejó en prenda por los 150 millones de pesos que debe por consumo de turbosina.

Fuentes de la SCT señalaron que, por lo pronto, no se ha considerado retirar la concesión a Aviacsa, debido a que antes de proceder de cualquier forma primero un tribunal colegiado tiene que resolver sobre la suspensión otorgada por el juez quinto de distrito de San Luis Potosí en relación con la seguridad de las aeronaves.

Por esa razón, explicaron, tampoco se puede dictaminar si la flota de Aviacsa garantiza las condiciones de aeronavegabilidad que exigió la Dirección General de Aeronáutica Civil. En tanto, el reclamo de los 292 millones de pesos por uso y aprovechamiento del espacio aéreo está concentrado en el SAT.

El director de ASA, Gilberto López Meyer explicó que se inició el proceso judicial para hacer efectivas las garantías que dejó Aviacsa por la deuda de 150 millones de pesos por consumo de turbosina. Dichas garantías consisten en un hotel y un galgódromo, cuya adjudicación, por parte de ASA, podría durar meses, si la aerolínea interpone una defensa legal, destacó el funcionario.