Aseguran autoridades que los policías fueron agredidos primero
Miércoles 5 de agosto de 2009, p. 33
León, Gto., 4 de agosto. Al menos 15 policías municipales amenazaron con propinar otra golpiza a los jóvenes a quienes, sin motivo aparente, detuvieron el domingo pasado en dos viviendas de la colonia León I, si los denuncian por lesiones y daños, acusaron cuatro de los ocho agredidos.
Nos dijeron que no pusiéramos demanda porque nos van a volver a romper la madre y nos va a ir peor
, relataron Gerardo Ortega, Francisco Hernández, Carlos González y Bernardo Torres, aún con huellas de la agresión.
A las 11 de la mañana de este martes los jóvenes se reunieron en una casa de la calle Beirut para ir a interponer una querella ante el Ministerio Público, pero un grupo de agentes fue a intimidarlos.
¡Salgan, hijos de su puta madre! ¡Les vamos a volver a romper el cantón!
gritaban los uniformados, narró Carlos González, quien tiene el rostro inflamado y varios golpes en el cuerpo.
El domingo los oficiales pasaron a bordo de una patrulla por la calle Martínez, donde se ubica el domicilio donde más de 30 policías de León irrumpieron y sacaron a golpes a los cuatro jóvenes. En la mañana estaban muy agresivos. Ya se querían volver a meter
, contó Carlos González.
Los 11 detenidos pagaron 8 mil 900 pesos por los daños que sufrió una patrulla y nos dijeron que nos van a cobrar otros 70 mil pesos de un escudo
, dijo.
En un comunicado, la Secretaría de Seguridad de León dijo que los policías intervinieron en una trifulca
y negó que golpearan a ocho personas y que allanaran y destrozaran una vivienda.
La dependencia aseguró que que una patrulla, un escudo, visores y toletes quedaron inutilizables debido a los daños que sufrieron en el enfrentamiento
, y que el policía Guillermo Mendoza Medina resultó lesionado.
Agregó que los policías acudieron porque recibieron el reporte de una riña, pero como no había nada se retiraron; en ese momento, afirmó, una persona les arrojó piedras desde una azotea.
Se pidió la autorización de vecinos para ingresar a sus casas y así poder llegar a la azotea de la casa marcada con el 205 y detener al resto de los jóvenes, que arrojaban piedras, palos, e incluso cohetones
, aseguró.