La adquisición de útiles escolares, uniformes y calzado para el ciclo escolar 2009-2010 implicará para las familias mexicanas un desembolso promedio de 4.2 salarios mínimos, es decir, entre 3 mil y 6 mil pesos, aseveró el secretario de Servicios a la Comunidad de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ramiro Jesús Sandoval.

Durante la inauguración de la primera Feria de Útiles Escolares UNAM 2009, el funcionario indicó que este año la inflación afectará a los mexicanos también en los gastos escolares, pues de acuerdo con datos de la Procuraduría Federal del Consumidor, hace a penas dos años las familias destinaron a este rubro tres salarios mínimos.

Agregó que los sectores más perjudicados son las clases medias y bajas, pues no pueden acceder a créditos para la compra de los útiles que necesitan anualmente sus hijos.

Un estudio del Banco Mundial revela que la falta de recursos para la compra de material escolar provoca la deserción en 77 de 79 naciones. Por lo que en México, subrayó, las familias se ven obligadas a recurrir a sus ahorros, solicitar prestamos o empeñar sus bienes a fin de librar el desembolso que implica el retorno a clases.

Informó que en el ciclo escolar pasado (2008-2009) unas 388 mil familias en México solicitaron préstamos prendarios al Nacional Monte de Piedad para cubrir gastos escolares, monto que equivalió a unos 2 mil millones de pesos.

Entrevistado por separado, el presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Artículos Escolares y de Oficina, Diego Céspedes, dijo que debido a la crisis económica la venta de útiles ha caído 20 por ciento, lo que cual provocó que en lo que va del año se hayan recortado 3 mil empleos directos en el sector, de un total de 13 mil 500.

Aseveró que otro de los problemas que enfrenta la industria son las mercancías de origen ilegal, pues 25 por ciento de los productos escolares que se comercian en el país son piratas.

Aun así, destacó, esta industria factura anualmente unos 800 millones de dólares, y confió en que al ser los útiles escolares artículos de primera necesidad, el sector se pueda recuperar.

El objetivo de esta feria de material escolar es ofrecer a la comunidad universitaria, a precios preferenciales, artículos y útiles, incluidos los nueva tecnología, que son cada vez más comunes en las aulas.

La feria se instaló en el estacionamiento de aspirantes, en Ciudad Universitaria, junto al Museo de Ciencias Universum. En el lugar se vende desde un lápiz hasta equipo de cómputo, y abrirá del 6 al 9 de agosto. Los consumidores podrán obtener descuentos de hasta 30 por ciento.

Este jueves habrá una feria similar en las Facultades de Estudios Superiores (FES) Iztacala y Zaragoza, y los días 11, 12 y 13 de agosto también se instalarán en las otras tres FES (Acatlán, Aragón y Cuautitlán, así como en los 14 planteles de bachillerato.

Asimismo, se informó que los trabajadores universitarios contarán con un esquema de financiamiento para la adquisición de productos, que se descontará vía nómina; además de que el próximo 10 de agosto, la cadena de tiendas de artículos escolares Lumen realizará una venta nocturna exclusiva para universitarios.

La educación es prioritaria, insiste el rector

Por otra parte, el rector José Narro Robles informó que inició acercamientos con algunos de los actores políticos que conformarán la siguiente legislatura con el fin de hacerles entender la importancia que tienen para el país la educación pública, la ciencia y la tecnología, y el error que representaría un recorte presupuestal en esos rubros.

Entrevistado tras la inauguración de la feria de útiles escolares, Narro sostuvo que en este momento de crisis, estas áreas, incluida la educación superior, son absolutamente prioritarias y estratégicas para México, por lo que las autoridades deben apoyarlas con mayores recursos y un impulso más contundente.

Hacer un recorte a la educación superior pública es una de las peores medidas que se pueden tomar. Al hacerlo cometeremos un error histórico que muchas generaciones nos reclamarán más adelante, subrayó.