Los recortes en el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA) son una realidad que se apoya en el decreto del pasado 28 de mayo, en el cual se establece en 9.9 por ciento el ahorro que ordenó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a todas las dependencias del gobierno federal.

Sin embargo el CNCA aún no detalla cifras, en pesos y centavos de lo que representaría ese recorte que ya ha causado descontento en varios sectores culturales.

Al respecto, Jaime Francisco Hernández, secretario ejecutivo de la dependencia, habla con La Jornada y precisa: El presupuesto del subsector cultura es superior a los 11 mil millones, mientras el del CNCA, como sector central, es de alrededor de 4 mil 900 millones de pesos.

El funcionario rechazó los despidos de quienes trabajan por honorarios como solución y afirmó que se realizan consultas con las secretarías de Educación Pública (SEP) y de Hacienda para que no se afecten actividades sustantivas, y pidió a la comunidad cultural que tengan confianza en que trabajamos día y noche cuidando el presupuesto público.

Para nosotros, añadió, es absolutamente importante que todos los actores del sector tengan información oportuna en este momento.

–¿Cuánto es lo que se planea ahorrar?

–Estamos en el trabajo de corregir las estimaciones que hemos realizado en las semanas recientes. Realmente los linea- mientos que emitió la Secretaría de Hacienda tienen que ver con medidas para todo el gobierno federal, que consisten básicamente en reducir 6.4 por ciento el gasto de operación y 3.5 por ciento las erogaciones en servicios personales, que es pago de nóminas y todo lo que tiene que ver con las contrataciones.

“Estimamos que la parte de servicios personales puede cubrirse con la vacancia normal de todos los años, de manera que no interrumpiéramos ninguno de los programas sustantivos ni de las acciones relevantes para el sector. En el caso del gasto de operación hacemos un esfuerzo muy importante –que de hecho había iniciado con anterioridad– para reducir el gasto en consumibles, telefonía, luz, al mínimo posible el costo de comisiones oficiales. La premisa fundamental es mantener las actividades sustantivas del sector y cuidar que no se vean afectadas.”

El funcionario rechazó las versiones que afirman que se ha pedido una reducción en gastos de 50 por ciento en algunas direcciones y coordinaciones. No conozco esa cifra. El comunicado oficial de la Secretaría de Hacienda del 28 de mayo habla solamente de 3.5 por ciento y de 6.4 por ciento al gasto de operación, en ningún documento oficial que yo haya visto se habla de 50 por ciento.

–¿Cómo deciden qué es lo que se recorta?

–Hemos trabajado muy de cerca todo el sector junto con la SEP y la SHCP buscando que los lineamientos que ya emitió Hacienda tengan alguna flexibilidad y que nos permitan explicar en los días por venir de qué manera podemos lograr que el impacto del ajuste se concentre en las áreas más relacionadas con el gasto de operación y no con las actividades sustantivas. Es una decisión conjunta.

–¿Qué más es lo que se planea hacer en concreto porque sin duda también se verán afectados programas culturales...?

–Estamos comprometidos en que las medidas de ajuste no impacten los programas. Venimos recuperándonos de los efectos de la contingencia sanitaria y a diferencia de otras ocasiones, en las que hemos recibido noticias de la Secretaría de Hacienda solamente mediante oficios, en esta ocasión hemos tenido una gran disposición para juntarnos, para tener reuniones de trabajo con ellos y con la SEP.

Lo fundamental es mantener las acciones de la política cultural sin interrupciones, pero sobre todo poder informar a la comunidad artística y cultural del país, y eso lo hemos estado haciendo de manera muy intensa las últimas horas y días recientes para que todos tengamos certeza que las acciones se van a mantener, que la gente sepa que estamos cuidando el máximo posible que el ajuste no tenga impacto negativo.

El secretario técnico descartó los despidos de quienes trabajan por honorarios, aunque reconoció que se interrumpirán las nuevas contrataciones y se verá afectado el rubro de asesorías cuando éstas no tengan que ver con actividades sustantivas.

El sector cultural, añadió, es complejo, tiene áreas muy amplias de investigación, de teatros y de centros de entretenimiento, los horarios son distintos a los de una oficina, esto nos lleva a ser muy creativos en las soluciones administrativas que debamos encontrar para que el recorte y el ajuste no afecte.

Rechazó además que la cultura sea el sector que siempre resulta el primer afectado por los recortes y recordó que el de 2009 es el presupuesto más alto aprobado para este rubro: Un aumento sin precedente en la historia del sector cultural, esto da clara muestra del compromiso del gobierno federal con el sector cultural.

–Hay una contradicción: primero se anuncia con bombo y platillo ese presupuesto y ahora viene el recorte.

–Hemos hecho un esfuerzo muy importante en el primer semestre del año para eliminar el subejercicio, esto es una noticia que no tiene precedente en el sector cultural, había sido un problema grave en los años recientes y lo que estamos comprometidos es en gastar con oportunidad los recursos, en poder utilizar de mejor manera el gasto público, focalizarlo en acciones de alto impacto para la sociedad, estamos lanzando estrategias nuevas de acceso todavía más abierto a los servicios que ofrecemos, y la idea justamente es que este incremento al presupuesto realmente se perciba como un esfuerzo del gobierno federal, y en particular de las instituciones culturales, para acercar los bienes y servicios culturales a la población.

Lo que vendrá en los próximos días son nuevas reuniones de trabajo, el establecimiento de las partidas que se incorporarán al ajuste, la revisión de la Secretaría de Hacienda y la revisión del presupuesto del año entrante, detalló el funcionario.