Los grupos parlamentarios del PRD en el Congreso reiteraron el llamado a Felipe Calderón, a fin de que en su carácter de presidente pro tempore del Grupo de Río, convoque a una reunión de emergencia de ese mecanismo para discutir la solución al conflicto en Honduras, toda vez que la situación se agrava y los golpistas incrementan la violación a los derechos humanos de la población.

Acompañados por la embajadora de Honduras en México, Rosalinda Bueso, y la ministra de Finanzas del gobierno de Manuel Zelaya, Rebeca Santos, los senadores Yeidckol Polevnsky, Silvano Aureoles, Carlos Sotelo y el diputado Humberto Zazueta advirtieron que el gobierno de facto incrementó las detenciones arbitrarias, censura contra los medios de comunicación y represión contra los manifestantes.

A todo ello, denunciaron, se suma el recrudecimiento de la intimidación contra los integrantes del gobierno de Manuel Zelaya, con la expedición de órdenes de aprehensión, a través de medios de cooperación internacional como la Interpol.

La ministra Rebeca Santos, una de de las afectadas, sostuvo que no tiene temor de someterse a la justicia, pero de un gobierno que legítimamente esté ejerciendo su derecho a gobernar, no de quienes acudieron a un golpe de Estado para hacerse del poder.

La ministra Santos advirtió que está claro quiénes son los que han hecho correr la sangre, cometido vejámenes y violaciones, los que en menos de 45 días tienen a la economía de Honduras al borde de la recesión, ya que han perdido 350 millones de dólares en reservas internacionales del país.

Por su parte, los senadores Polevnsky y Aureoles resaltaron que un reciente informe de una misión internacional de derechos humanos, en la que participaron profesionales independientes y expertos en la materia de América Latina y Europa, concluye que la situación de inestabilidad para la población civil en Honduras se ve agravada por la violación recurrente de sus garantías fundamentales.

Esa misión internacional de observación denunció que 136 personas sufrieron agresiones y más de 2 mil, entre ellas unos 100 extranjeros, fueron detenidas en forma arbitraria por violar el toque de queda o participar en marchas contra el golpe de Estado. Asimismo, 12 periodistas y ocho medios de comunicación resultaron afectados por abusos contra la libertad de expresión.

La represión se manifiesta en particular contra los líderes campesinos, ambientalistas, indígenas, afrodescendientes, mujeres que se movilizan por sus derechos y contra los dirigentes sindicales.

Por ello, senadores y diputados del PRD reiteraron el llamado al Ejecutivo mexicano, a fin de que en uso de sus atribuciones como presidente pro tempore del Grupo de Río, convoque a una reunión de emergencia para pronunciarse sobre el pronto restablecimiento del orden constitucional en la República de Honduras.

Asimismo, demandaron también al gobierno federal que pida al Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que ponga en práctica las medidas necesarias para contribuir a garantizar el goce y disfrute de los derechos fundamentales de la población hondureña.

Polevnsky recordó que la Comisión Permanente aprobó hace tres semanas un punto de acuerdo en ese sentido y confía en que Calderón le dé pronta respuesta. Creo que el compromiso que hizo con el presidente Zelaya lo obliga a convocar al Grupo de Río.