Si el gobierno federal recurre a un mayor endeudamiento para paliar el déficit en las finanzas públicas podría propiciar que el país reciba una baja en su calificación de riesgo crediticio, lo que conllevaría una salida de capitales y mayor depreciación del tipo de cambio, aseveró Juan Sherwell, director de la maestría en finanzas del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).

El pasado martes el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, informó que el gobierno propondrá un paquete económico para 2010 basado en más impuestos y endeudamiento moderado, con el fin de hacer frente a un faltante de 300 mil millones de pesos para financiar el presupuesto.

El académico estimó que para el próximo año el déficit fiscal del país será de alrededor de 2.5 puntos porcentuales, lo cual lo coloca en la mira de algunas calificadoras internacionales.

El déficit dependerá de cuánto sea el recorte al gasto y de cuánto pueda el gobierno aumentar la recaudación fiscal. Si la diferencia entre los gastos del gobierno y los ingresos vía recaudación resulta deficitario en 3 por ciento estaremos poniendo en riesgo la calificación, opinó.

Agregó que el panorama económico para el próximo año se agravará, debido a que para entonces el país habrá gastado los fondos de la cobertura petrolera y 60 por ciento de los de estabilización, por lo que el margen de maniobra para las autoridades económicas se verá reducido.