América sufrió, pero al final le alcanzó para obtener su primer triunfo en la cancha del estadio Azteca, al vencer 2-1 al Atlas, en la cuarta jornada del torneo Apertura 2009, ante una ocupación superior a la mitad del inmueble.

Salvador Cabañas se encargó de abrir el marcador, al minuto 16; en tanto que la visita igualó al 22, por conducto de Ismael Fuentes. Remachó la victoria y se estrenó en México el chileno Jean Beausejour, al minuto 60.

Atlas inició sus movimientos sin el menor respeto por los anfitriones y, antes de cumplirse el minuto 5, Darío Botinelli soltó un quemante cañonazo desde unos 15 metros fuera del área, que para fortuna de Guillermo Ochoa reventó en el travesaño. La primera advertencia estaba hecha.

Con el sol a plenitud, los atlistas mostraban mejor ubicación en la cancha y mantenían el acoso sobre el marco americanista, como al minuto 10, cuando el argentino Botinelli habilitó a Édgar Pacheco, éste remató con serenidad y puso en apuros a Israel Jagger Martínez, quien debió enviar a tiro de esquina. Un instante después, Hugo Ayala prendió de cabeza un balón que apenas salió desviado del poste izquierdo de la meta de Ochoa.

Las Águilas decidieron sacudirse el menosprecio de los invitados en el momento en que Enrique Esqueda brindó un servicio milimétrico al paraguayo Cabañas, quien desde fuera del área se acomodó para tirar hacia el segundo palo del portero Mariano Barbosa y así ponerle número a la casa con el 1-0.

Pero los Zorros estaban dispuestos a vender cara su derrota y, aprovechando que seguían dominando las acciones, Ismael Fuentes se decidió a ir al fondo para anticipar al colombiano Aquivaldo Mosquera –de regreso luego del castigo de un juego– y firmar el tanto del empate al minuto 22. Lo bueno fue el gol; lo malo, que salió noqueado. Lo mejor, que al minuto estaba de vuelta con el aplauso de sus aficionados, unos 500 que no pararon de animar a los suyos durante los 90 minutos.

Segundos antes de terminar la primera parte, Ángel Reyna recibió un balón incómodo, tardó en arreglarlo a su perfil, para finalmente terminar en una llegada más. Todavía América armó otra jugada ante el marco atlista, pero sin modificar nada.

En el complemento, el cuadro local salió con nuevo rostro y algunas adecuaciones que estuvieron a punto de darle una anotación, al momento en que Reyna recibió el esférico, condujo metros, recortó, pero su tiro-centro fue fallido al salir por el fondo del terreno sin que nadie lo alcanzara.

Ahora fueron los de casa quienes buscaban imponer su criterio, con un cañonazo de Reyna que se estrelló en el travesaño, pero atento al rebote, Beausejour se lució con su primera anotación en el futbol nacional, que hizo la diferencia la tarde de ayer para el 2-1, y que dio a su equipo el segundo triunfo al hilo de la campaña.

América apretaba. Primero Esqueda, de cabeza, hizo temblar al portero Barbosa; sin recuperarse del susto, Cabañas volvió a tentar la anotación, sin lograrla, con un tiro que salió apenas desviado, aunque los aficionados la agradecieron con cánticos.

Atlas no bajaba los brazos. En un tiro de esquina, Néstor Vidrio, al minuto 77, inició la veloz carrera desde fuera del área para rematar con la cabeza, aunque sólo quedó en una nueva y fallida oportunidad, cuando las porras de ambas escuadras estaban en plena gritería, tratando de impulsar a sus equipos a empatar y mantener la ventaja, respectivamente.

Pacheco estuvo a punto de lograr la igualada al minuto 82, cuando recibió un servicio medido, le ganó la espalda a Mosquera y cuando había vencido también a Ochoa, el balón rebotó en el travesaño, aunque hizo fluir la adrenalina entre sus seguidores y cortar la respiración de los americanistas; como al 90, cuando Daniel Ríos remató de cabeza al poste.

América llegó a siete unidades en el grupo dos, mientras Atlas se quedó con seis, en el primer pelotón.

Jesús Ramírez, técnico del América, parecía no poder contener la sonrisa de alegría al mencionar que ganar siempre es muy padre. Este triunfo es muy bueno para el equipo, la directiva y la afición porque creo que ya se lo merecían, y agregó que valora mucho el funcionamiento mostrado por los muchachos, quienes hicieron un gran esfuerzo.

El portero Guillermo Ochoa se dijo contento por su buena racha en la selección nacional, y ahora con el América, aunque espera prolongar la situación lo más que se pueda con mayor trabajo. Apuntó que el Cruz Azul-América de la próxima jornada no es un clásico, ya que el único que hay en frente a Chivas.

Esta vez Ricardo La Volpe, timonel del Atlas, no se presentó ante los medios.