Escasez, muertes por olas de calor y daños a la agricultura, las consecuencias: expertos
Genera Laredo 129 millones de toneladas de gases de efecto invernadero, resaltan en foro
Lunes 17 de agosto de 2009, p. 39
La Jolla, Cal., 16 de agosto. Las poblaciones de la frontera norte de México serán de las más afectadas por el cambio climático, ya que en esa región se prevé una mayor sequía, debido a la reducción en 20 por ciento de la disponibilidad de agua, y daños en la agricultura, además de un incremento de muertes por las olas de calor, advirtieron aquí especialistas.
María Teresa Cavazos, especialista del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior, de Ensenada, explicó que de acuerdo con los resultados de modelos científicos se ha determinado que en Baja California lloverá con menor intensidad, con variaciones cada año; asimismo, se prevé para 2050 una disminución en 20 por ciento de las precipitaciones en zonas que ya ahora padecen escasez de agua.
Durante su intervención en el taller Cambio climático: retos y oportunidades para México, indicó que se afectará negativamente el caudal del río Colorado, compartido por México y Estados Unidos, y del cual dependen agricultores y poblaciones de ambas naciones.
En 20 años se espera el incremento de la temperatura en un grado centígrado en la zona norte del país y la disminución en 20 por ciento de la precipitación pluvial en Ensenada y Tijuana, donde actualmente el nivel de lluvias alcanza los 270 milímetros al año –10 veces menos que en Tabasco.
Esta situación climática, agregó, traerá consigo olas de calor más intensas, las cuales se forman por las altas temperaturas y la evaporación.
Estos fenómenos ya ocasionan una mortalidad de 1.2 por ciento en Sonora y 1.3 por ciento en Baja California, pero se prevé que se podrían incrementar a 3 por ciento en esas entidades, explicó a su vez Gabriela Muñoz, investigadora sobre cambio climático, energía y calidad del aire del Colegio de la Frontera Norte.
Asentó que en el norte de México se afectará la disponibilidad de agua, por lo que se incrementará la sequía y, entre otras consecuencias, se producirá una carestía del líquido y problemas en su distribución.
Recordó que el organismo encargado del estudio a escala mundial del calentamiento global, el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, identifica a Baja California y Sonora como zonas críticas.
Destacó que la escasez de agua incidirá negativamente en la agricultura, sector que consume 75 por ciento del líquido en territorio nacional, mientras que el resto se distribuye entre el consumo humano e industrial. Precisó que se espera una mayor competencia por el uso del recurso entre los sectores que la consumen.
Esta situación traerá consigo que cultivos como el maíz en Sonora se vea afectado, y también se ocasionarán procesos de fragmentación y pérdida de biodiversidad.
Aún no se ve lo que va a pasar a largo plazo. Se esperan más sequías, escasez de agua, cambios en el patrón de lluvias, inundaciones y aumento en la temperatura
, asentó.
La frontera norte, dijo en su participación en el taller, es un área dinámica en la cual las causas del cambio climático pueden ser importantes, al igual que sus consecuencias, y también se comparten acuíferos, cuencas y áreas atmosféricas.
Emisiones contaminantes
Gabriela Muñoz explicó que en la zona norte del país se emiten importantes cantidades de gases de efecto invernadero (GEI) y como ejemplo dijo que Laredo –ciudad fronteriza de Estados Unidos– emite alrededor de 129 millones toneladas de bióxido de carbono, el más importante de los GEI.
Actualmente, los estados de California, Nuevo México, Baja California y Sonora ya cuentan con un inventario de emisiones que identifica las fuentes y cuánto emiten, explicó.
A escala nacional, el sector energía es el que más emisiones de GEI genera, con 61 por ciento, pero en Baja California el porcentaje se eleva a 78 por ciento; disminuye el de agricultura de 21 por ciento nacional a 6 por ciento, según datos correspondientes a 2002, puntualizó Efraín Nieblas, director de gestión ambiental de la Secretaría de Protección Ambiental de Baja California.