Cecilia Toussaint cantó por primera vez con el grupo Arpía el 23 de septiembre de 1983, en el teatro Carlos Lazo de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma México. El rock unió los proyectos de aquellos jóvenes y de ahí surgió un disco: Arpía, que este año cumple cinco lustros. Para celebrarlo, el viernes 21 de agosto, a partir de las ocho de la noche, darán un concierto gratuito en el Multiforo Ollin Kan (San Fernando esquina Benito Juárez, centro de Tlalpan), que será grabado para producir un disco en vivo.

Arpía lo integraron originalmente: Cecilia, voz; Rodrigo Morales, bajo; José Luis Domínguez, guitarra, y Héctor Castillo, batería.

En entrevista, Cecilia, José Luis y Rodrigo, así como el joven baterista invitado Iván García, hablaron de su presentación. Lo teníamos guardadito, dijo José Luis. “Arpía lo grabamos en 1987”, precisó Rodrigo.

Toussaint comentó: Fue Jaime López quien nos presentó a José Luis y a mí. José Luis: Luego hicimos una agrupación Rodrigo Morales, su hermano Roberto, Héctor Castillo (baterista) y nosotros dos (Cecilia y él).

Disco grabado en vivo

En entrevista Cecilia comenta: “Vamos a retomar todo el material de Arpía; no quisimos hacer demasiadas modificaciones. Se cumplieron 25 años del proyecto y teníamos ganas de celebrarlo. En noviembre pasado hicimos un concierto, en el que la respuesta del público fue fantástica y conmovedora.

De ahí la idea de hacer un disco en vivo. La propuesta es la misma, pero 25 años después. A eso hay que sumar la experiencia de cada quien, que de algún modo se tiene que notar. No puede sonar igual, aunque los arreglos no los modificamos.

José Luis: “Sí, creo que sonamos mejor. Tienen que ver lo añejo de nuestras vidas y el hecho de que no hemos dejado de tocar en todo este tiempo. Además, ahora hay otra tecnología.

“Arpía fue uno de los primeros proyectos en el rock en los inicios de los años 80 que abrieron puertas. A mucha gente se le despertó la imaginación con lo nuestro. Digo, si esto le suena a alguien como una barrabasada, pues ni modo, pero fue así. Algunos de quienes nos escucharon en ese tiempo hacen otras cosas. Eso lo dicen ellos.”

Para Cecilia: “A 25 años de aquel disco he seguido trabajando mi voz y nunca he dejado de tomar clases. Tengo una manera distinta de acercarme al trabajo vocal. Ahora poseo más experiencia y certeza, claridad en lo que hago. El hecho de compartir con José Luis y con Rodrigo de nuevo es muy conmovedor.

Rodrigo Morales, José Luis Domínguez y Cecilia Toussaint, luego de la entrevistaFoto María Meléndrez Parada

“Después de tantos años puedo rescatar el porqué estuvimos juntos y logramos lo que hicimos. El disco de Arpía se sigue vendiendo y es por algo. Una de las razones es la profunda magia, amor y cariño que hay entre nosotros tres, más el respeto como individuos y músicos.

“Cuando sacamos el disco tuvimos una tocada en el Salón Margo y llevamos algunos que se agotaron en unos minutos. Creo que nosotros tres nunca medimos el alcance de nuestro trabajo. A la distancia es más fácil verlo: creo que es un referente importante dentro de la música en este país.

“Fuimos el primer grupo de rock que se aventó a grabar de manera independiente. Ahora está todo ese rollo de si son indies o no, pero nosotros desde el principio nos concebimos y trabajamos así. Fuimos punta de lanza para muchas cosas. En su momento nos la pasábamos muy bien y tocábamos muchísimo. Como grupo base de Hip Setenta estábamos El Tri, nosotros y otro, Peli Peligros, los viernes, sábados y domingos.

Nos íbamos a La Rockola, a Rockotitlán, en Tlanepantla, en deportivos, en provincia. Nos movíamos muchísimo, y en condiciones paupérrimas. Lo que nos unía era el placer de estar arriba, en el escenario.

Rodrigo añadió que a las canciones de Arpía les ha ido muy bien: Son actuales. Creo que ésa es otra ventaja del grupo: teníamos muy buenos compositores: Jaime López y Pepe Elorza, quienes siguen siendo de lo mejor que se ha producido en este país. En el concierto del año pasado había chavitos veinteañeros. Por la edad es imposible que nos hubieran visto y, sin embargo, se sabían las canciones.

José Luis: La fuerza en la interpretación es única. Nadie lo hacía ni las frases musicales y los sonidos con distorsiones. Todo eso generó esa explosión, de la que no nos habíamos dado cuenta.

Cecilia: Antes de este proyecto cantaba boleros, en algún momento de mi vida conocí a Jaime (López), nos hicimos amigos, coincidimos sobre todo en la forma de hablar y de un sentido del humor muy particular.