Especialistas en derecho electoral criticaron la propuesta del Ejecutivo federal para retomar el proyecto de cédula de identidad para los mexicanos, pues se desincentivará la participación en los procesos electorales, además de que se echarían a la basura 40 mil millones de pesos que México ha invertido para la expedición de la credencial de elector. Asimismo, subrayaron que las recientes reformas sobre comicios cumplieron con el proceso y a sólo dos años de sus modificaciones no pueden ser sujetas de críticas ni señalamientos de ineficiencia.

Durante la mesa Las atribuciones de las autoridades electorales a prueba, en el contexto del seminario Democracia y reglas del juego, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Leonardo Valdés, señaló que esto debe ser analizado por el Legislativo y subrayó que pese a que se concrete la cédula de identidad, la credencial de elector debe sobrevivir.

En entrevista, Valdés dijo: si hacemos una lectura muy rigurosa de la Ley General de Población la conclusión es que la cédula de identidad tendría que sustituir a la credencial para votar, pero esa es una norma de los años 90, que se puso además con un transitorio, porque se pensaba que el gobierno federal iba a construir el registro de cédula ciudadana con celeridad, pero pasaron años y eso apenas entró a la fase de que la Secretaría de Gobernación pueda emitir el documento.

Consideró que toca al Legislativo evaluar el caso. Tienen que hacer las adecuaciones a ambas normativas para que se dé una de dos circunstancias: o prevalece la cédula de identidad como único instrumento de identificación, o sobrevive la credencial para votar como un instrumento para eso, para sufragar, porque así está concebido y construido.

Sin embargo, manifestó su deseo de que la credencial del IFE sobreviva y permanezca bajo cualquier esquema, porque es un instrumento que no sólo tiene una gran aceptación social, sino porque además tiene capacidad jurídica de identificar a los ciudadanos mexicanos y dar certeza en el evento más importante para el IFE, la votación. La credencial nos permite garantizar que sólo aquellos que tienen derecho a votar lo hagan y que además lo hagan sólo una vez.

En su turno, Jorge Alcocer, especialista en derecho electoral, sostuvo que jurídicamente la coexistencia de ambos elementos no es posible. Asimismo manifestó que de concretarse la cédula de identidad, representaría un derroche de los recursos que ha invertido el país en la tramitación y generalización de la credencial con fotografía, la cual sería rebajada a un simple comprobante de domicilio, por lo que demandó al IFE una postura firme al respecto.

Durante el seminario también se manifestó que de crearse la cédula de identidad miles de jóvenes que aún no cuentan con la credencial para votar no la tramitarían, lo que sería perjudicial para futuros procesos electorales, pues no contarían con el principal elemento que permite ejercer el derecho al sufragio. La presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, María del Carmen Alanís, hizo un largo recuento de los fallos que ese órgano ha emitido ante las diversas controversias surgidas tras el proceso del 5 de julio pasado, entre ellos en el que se exculpó a Enrique Peña Nieto, al considerar que no incurrió en delitos electorales por aparecer en espacios noticiosos.