Sábado 29 de agosto de 2009, p. 22
Washington, 28 de agosto. Los ingresos publicitarios de los periódicos estadunidenses siguieron cayendo. Lo hicieron 29 por ciento durante el segundo trimestre del año, en comparación con el mismo periodo de 2008, anunció la Asociación de Diarios de Estados Unidos (NAA, por sus siglas en inglés).
La prensa y las publicaciones en Internet recaudaron 6 mil 800 millones de dólares por concepto de anuncios publicitarios, mientras que en el mismo lapso de 2008 representaron 9 mil 600 millones de dólares, reveló la NAA.
Las publicaciones impresas son las más golpeadas. Sus ingresos publicitarios bajaron 6 mil 200 millones de dólares; sus entradas por avisos clasificados registraron una reducción de 40.4, es decir, llegaron a mil 500 millones de dólares.
La mayor competencia de la prensa son los sitios que publican estos avisos de forma gratuita, como Craigslist. Los diarios en Internet registraron una caída de ingresos de 15.9 por ciento; se colocaron en 653.1 millones de dólares.
Optimismo, pese a todo
En un comunicado, el presidente de la NAA, John Sturm, estimó que pese a los resultados hay motivos para ser optimista
. Consideró que cuando la economía empiece a recomponerse los anunciantes volverán a gastar
.
La prensa estadunidense sufrió una serie de quiebras, despidos y cierres en los meses pasados. Diversas empresas editoras han reducido su plantilla, se han declarado en bancarrota o han cerrado diarios emblemáticos porque los lectores han optado por las noticias en Internet, al tiempo que la recesión ha disminuido los ingresos por publicidad.
Entre las publicaciones que cerraron en los meses recientes se encuentra el Tucson Citizen, el diario más antiguo de Arizona, que el pasado 16 de mayo imprimió su última edición, después de casi 139 años. Ante los bajos ingresos, los dueños decidieron mantener únicamente su versión on line, donde continúa como un sitio de opinión.
El 23 de julio el Ann Arbor News, de Michigan, también publicó su última edición impresa.
Las editoriales de periódicos de Estados Unidos más respetadas –The Washington Post y The New York Times– no escaparon a esta situación adversa. En marzo pasado, ambos anunciaron una serie de recortes de personal, tras argumentar una aparatosa caída de los ingresos de publicidad
.