Esperamos que el tricolor actúe con vocación de poder
No planteamos nuevas cargas impositivas. Proponemos hacer reformas para que el país crezca. Hagamos una que permita construir cinco o seis refinerías, en lugar de disputarnos absurdamente una que Pemex construirá con recursos fiscales que podrían dedicarse a proyectos más rentables
Domingo 30 de agosto de 2009, p. 5
César Nava Vázquez lo asume y lo advierte sin rodeos: a partir del primero de septiembre el Partido Revolucionario Institucional (PRI) será corresponsable de la marcha de la economía del país. El dirigente panista explica que por el peso que tiene en la Cámara de Diputados (237 legisladores), el tricolor está en posibilidad de aprobar el presupuesto sólo con establecer alianza con otro partido.
Va más allá en sus apreciaciones: el PRI es corresponsable de empujar una agenda ambiciosa de transformación del país, porque tiene el mandato ciudadano para hacerlo. Nosotros confiamos en que esté a la altura de su circunstancia.
Nava Vázquez dialoga con La Jornada en sus oficinas del Partido Acción Nacional (PAN). Se nota que apenas tiene unos días en el cargo. El lugar luce igual que cuando Germán Martínez ocupaba la presidencia. Sólo las fotografías de los hijos del actual dirigente y un librero medio vacío marcan una diferencia.
De respuestas rápidas, pero cuidadosas, el presidente del panismo habla de las causas que originaron la debacle electoral de su partido el pasado 5 de julio; de las consecuencias que trajo la derrota, una de ellas, quizá la mas dolorosa, la conformación de una nueva mayoría legislativa en manos del PRI, y de refilón se refiere a la contienda electoral de 2012.
Una de mis responsabilidades será asegurarme de que tengamos liderazgos claramente posicionados y competitivos rumbo a 2012
, señala sin querer reconocer lo que en los corrillos políticos todos saben: que en el PAN la caballada está flaca
.
Estoy seguro, agrega, de que tenemos los precandidatos naturales para la elección presidencial. Además, tres años son suficientes para preparar las condiciones para ganar la elección, afirma.
–Desde su punto de vista, ¿cuáles fueron las causas que originaron los magros resultados que obtuvo el PAN?
–En estas semanas pude conocer algunas de las causas. Mencionaría dos: una exógena, que tiene que ver con los efectos de la crisis y el voto de castigo que ello implicó para el gobierno, y, por otra parte, una endógena o propia del partido.
En algunos casos salimos a la campaña derrotados por nosotros mismos. No fuimos capaces de generar condiciones de unidad y de inclusión, y eso sin duda afectó nuestro desempeño.
–Diversos analistas atribuyen la derrota a una equivocada estrategia mediática, que se centró en el tema de la seguridad, pero descuidó el de la economía, y a los problemas de corrupción que se han generado en algunos gobiernos panistas. ¿Usted coincidiría con esa visión? ¿Habrá alguna sanción para quienes han caído en corruptelas?
–Seremos muy cuidadosos para encarar esos temas. Por ahora lo prudente es esperar que termine el proceso de reflexión –que realiza una comisión formada con ese fin– y, luego, tomar las acciones que corresponden.
–¿Cómo enfrentará el PAN la representación que obtuvo el PRI en San Lázaro?
–A partir del primero de septiembre el PRI es corresponsable del rumbo de la economía del país. Eso debemos advertirlo y asumirlo con toda claridad. Las decisiones que tome le serán anotadas por la ciudadanía en su haber. Así como el PAN fue oposición leal y constructiva para el país durante 61 años, esperamos que el PRI en los siguientes tres años actúe con responsabilidad y vocación de poder.
“Nosotros, por nuestra parte, no cejaremos en nuestra agenda; la plantearemos con claridad, la defenderemos y buscaremos los acuerdos que sean posibles con todos los partidos políticos.
Hay dos manera de abordar el presupuesto del país y en general la economía en los siguientes tres años. Una es la inercial y mediocre en la que se inscriben aquellos que piden administrar las condiciones del país sin aspirar a crecer, y otra es la visión ambiciosa que enarbolamos, la cual propone transformar el país, hacerlo más competitivo y atractivo para las inversiones, y que de esa manera crezca la economía y se pueda salir más rápido de la crisis. En este contexto, el PRI es corresponsable de empujar una agenda ambiciosa de transformación.
Una de mis responsabilidades será asegurarme de que tengamos liderazgos claramente posicionados y competitivos rumbo a 2012, afirma el líder del blanquiazulFoto Marco Peláez
–Francisco Rojas, el coordinador de los diputados del PRI, ha dicho que, en su papel de mayoría en San Lázaro, no avasallarán, pero tampoco van a ceder a la creación de nuevos impuestos –se le comenta.
–Nosotros tampoco estamos planteando nuevas cargas impositivas. Lo que proponemos es hacer las reformas legales necesarias para que el país crezca. Por ejemplo, claramente en el rubro energético. Veamos lo que hizo Brasil con Petrobras. Hagamos una reforma en refinación, que permita construir cinco o seis refinerías, en lugar de disputarnos absurdamente una que Pemex construirá con recursos fiscales que podrían dedicarse a proyectos más rentables.
–El año pasado, el PRI se opuso a una reforma de esa naturaleza. ¿Por qué habría de aceptarla ahora?
–Cada partido será responsable de las decisiones que tome en estos tres años.
–¿Qué planteará el PAN para el presupuesto de 2010?
–Para cubrir el hueco financiero de 300 mil millones de pesos, proponemos que se apoye el esfuerzo de austeridad que plantea el gobierno; recortar programas no prioritarios, sin afectar el gasto social; no se aceptarán cargas fiscales adicionales, y habrá que pensar en la posibilidad de contratar deuda moderada que se pueda cubrir en dos o tres años, para que se llegue a 2012 en condiciones de recuperar el equilibrio presupuestal.
–¿Qué proponen para enfrentar los recortes en el ejercicio fiscal de 2009?
–El recorte de 2009, lamentablemente, ya ocurrió, y fue una decisión producto de las facultades de la Secretaría de Hacienda.
–¿Qué plantean para los municipios en bancarrota?
–El lunes nos reunimos con el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, y abordamos varios mecanismos para aliviar las finanzas municipales y estatales, como el otorgamiento de créditos a través de Banobras para el financiamiento de infraestructura.
–Por otra parte, usted ha dicho que respaldará al gobierno federal, sin caer en la subordinación del partido. ¿Cómo hacerlo en un sistema político en el que parece inevitable que el partido en el poder se convierta en partido-gobierno?
–En estos 18 días la relación con el gobierno ha sido de cercanía y de corresponsabilidad, sin subordinación. El Comité Ejecutivo Nacional ha tomado decisiones con plenitud de autonomía.
–¿Habrá algún momento en el que se escuchen críticas del PAN a la administración federal?
–Las críticas del PAN al gobierno se harán en los espacios creados para eso. La crítica pública se la dejamos a la oposición.
–¿Terminó la rebelión?
–No termina lo que no empieza. En el PAN discusión no es sinónimo de división o de rebelión. La posibilidad de divergencia de opiniones es connatural a la democracia; es la materia prima de nuestro trabajo.
–¿La inclusión del senador Santiago Creel en la comisión política del partido es un guiño para los inconformes con su llegada a la presidencia?
–Es una convicción. Conozco a Santiago desde hace muchos años y estoy convencido de la importancia de su participación.
–¿Se incluirán otros liderazgos inconformes?
–Ya lo he hecho y lo seguiremos haciendo. No habrá en mi dirigencia la lógica de la exclusión ni de la hegemonía que busca el exterminio del contrario.