Con 480 vehículos, entre autos, camiones, grúas y un tráiler, casi 5 mil trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) realizaron ayer un mitin durante más de 10 horas frente a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), en Periférico Sur, para exigir la entrega de la toma de nota de Martín Esparza Flores como secretario general.

Llegaron antes de las 9 de la mañana dispuestos a permanecer en ese lugar hasta obtener respuesta positiva y levantaron el plantón pasadas las 7 de la noche, cuando tras horas de discusión las autoridades reconocieron que ahora sí estaba completo el expediente y ya no faltaba nada para el trámite.

Los electricistas pusieron de plazo el lunes 7 de septiembre para que la STPS entregue la toma de nota que hará oficial el triunfo de Esparza en las pasadas elecciones o de lo contrario, señalaron, paralizarán la ciudad la próxima semana para exigir que se respete la autonomía del sindicato.

Los electricistas bloquearon el Periférico en ambos sentidos, y vaciaron los centros de trabajo.

En tanto, en las instalaciones de la STPS sacaron temprano a los trabajadores y vaciaron los estacionamientos. Mientras, el secretario del Trabajo, Javier Lozano, de gira por Puebla, coordinó desde esa entidad las negociaciones con el SME y fue consultado vía telefónica sobre las acciones a adoptar por los funcionarios que atendieron a una comisión de trabajadores.

El subsecretario del Trabajo, Álvaro Castro, en entrevista con reporteros señaló que la dependencia no cederá a presiones ni chantajes, que el plazo para responder a una solicitud de toma de nota es de 60 días naturales, por lo que la STPS tiene hasta el 5 de octubre para dar respuesta. Reprobó que al ventilar y debatir esos asuntos se adopten decisiones como obstruir vialidades afectando el derecho de tránsito de la población.

Más votos que trabajadores

Afirmó que la resolución se dará apegada a derecho y no es cuestión política; expuso que se emitieron requerimientos a los solicitantes de la toma de nota ya que el padrón de trabajadores registrados ante la STPS es de 41 mil 975 y el padrón electoral, es decir, el número de los que votaron fue de 66 mil 388, y se requiere aclarar esta diferencia.

La circulación en Periférico Sur frente a las instalaciones de la STPS se redujo a un solo carrilFoto Alfredo Domínguez

Los electricistas señalaron de inmediato a los funcionarios que la diferencia entre uno y otro número la representaban los más de 20 mil jubilados que tienen derecho a voto, según sus estatutos.

El conflicto se originó porque en las pasadas elecciones del SME, Martín Esparza ganó por diferencia de 352 votos, y el proceso fue impugnado por su contrincante Alejandro Muñoz, quién presentó una demanda ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. Sin embargo, desde el 5 de agosto, la representación legal del sindicato pidió la toma de nota, es decir el reconocimiento oficial para Esparza Flores conforme sus estatutos; sin embargo, la dependencia no ha entregado este documento, lo que es considerado como una violación a la autonomía de la organización, porque ésta ya decidió quién es su secretario general y la secretaría no lo quiere reconocer.

Esparza Flores, señaló al levantar el mitin de ayer que la secretaría ya no tiene para dónde hacerse, pues reconoció que ya se completó todo el trámite, y no le queda más que entregar este documento. Explicó que para el sindicato está claro que este es un asunto político, por lo que van a estar muy pendientes de las acciones que tome la dependencia y el lunes regresaran con más trabajadores a exigir que se entregue la toma de nota, pues ya se cumplió con lo que establece la ley, y se revisaron las cifras de votantes, por lo que no hay pretexto, ellos mismos dijeron que no falta nada y solo les queda cumplir o de lo contrario el SME estaría dispuesto a paralizar la ciudad, dijeron.

Los funcionarios de la Dirección General del Registro de Asociaciones, confiaron a los reporteros que ambos bandos están presionando a la dependencia y no van permitirlo, mientras afuera, los trabajadores denunciaron a gritos y en diferentes tonos que en este conflicto tiene metidas las manos el gobierno para debilitar a la organización.