Deficiencias en infraestructura y falta de servicios básicos, revelan inspectores de la Codhey
Domingo 6 de septiembre de 2009, p. 31
Mérida, Yuc., 5 de septiembre. Las 106 cárceles municipales de Yucatán están en condiciones deplorables, constituyen focos de infección, los reos carecen de servicios básicos como agua potable, luz y sanitarios, y sus garantías individuales son violadas flagrantemente, informó la Comisión de Derechos Humanos del Estado (Codhey).
Durante inspecciones efectuadas del primero de julio de 2008 al 30 de junio de 2009, el organismo constató que persisten deficiencias en infraestructura básica, falta capacitación a personal operativo y directivo y sólo 15 por ciento realiza valoraciones médicas a los arrestados.
Jorge Victoria Maldonado, ombudsman estatal, señaló que de las 106 cárceles supervisadas, 15 no cuentan con ningún tipo de registro de personas arrestadas. Aunque 86 sí cumplen con este procedimiento, se observó que no siempre se efectúa de manera adecuada y sólo 26 (25 por ciento) comunas cumplen con la documentación de presos.
La visita familiar es permitida en la totalidad de los municipios, pero sólo 51 cárceles autorizan a los arrestados realizar llamadas telefónicas, que se efectúan en 30 prisiones desde el celular del arrestado o desde un aparato público.
En 65 por ciento de las cárceles, en total 68, el gasto de alimentación a los internos está a cargo de sus familiares. Victoria Maldonado argumentó que los alcaldes no disponen de presupuesto para la compra de alimentos, además los arrestos no duran más de 24 horas.
Únicamente en 15 por ciento de las cárceles se realizan valoraciones médicas a todos los arrestados; en 15 por ciento de los sitios visitados por la Codhey no se aplica la separación de género y se permite la convivencia entre hombres y mujeres.
En lo que se refiere a la iluminación y ventilación natural en las celdas se constató que en 42 por ciento de ellas es deficiente, ya sea porque no cuentan con ventanas o porque sus espacios son reducidos; en 94 municipios se constató que no existe luz artificial en las celdas.
En el reporte se indica que el 80 por ciento de las cárceles no cuenta con sanitarios en las celdas; las que sí tienen el servicio no funcionan, están en condiciones deplorables y antihigiénicas, tupidas con restos de basura y desperdicios orgánicos.
Entre los métodos de control utilizados por las policías se encuentran esposas, gas lacrimógeno, toletes y sometimiento mediante la fuerza física, finaliza el reporte de la Codhey.