La Cámara de Senadores y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) instalaron ayer el Observatorio nacional contra la trata de personas. Durante el acto, el ombudsman José Luis Soberanes cuestionó: ¿qué falta para atender en el país este problema? Faltan políticas públicas en los tres niveles de gobierno comprometidas de verdad con hechos y no con palabras para erradicar la moderna esclavitud.

El quinto visitador general de la CNDH, Mauricio Farath Guevara, subrayó que junto con el Centro de Estudios e Investigación en Desarrollo y Asistencia Social (Ceidas) elaboramos el diagnóstico sobre las condiciones de vulnerabilidad que propicia la trata de personas en el país.

En ese estudio se subraya que en México se carece de un sistema de seguimiento, información y construcción de estadísticas para describir con precisión las dimensiones de alcance de este flagelo.

Explicó que 21 estados han realizado reformas para tipificar este delito, pero esa tipología presenta deficiencias que deben subsanarse, ya que implican vacíos que pueden ser capitalizados por la delincuencia para procurar su impunidad y cierran la posibilidad de actuar en la prevención y en la atención a las víctimas.

La embajadora de Suecia en México, Ana Kerstin Erica Lindstedt, manifestó que “seguimos con interés el desarrollo del ombudsman en México, vemos que ha habido avances, pero aún queda mucho por hacer”. Añadió que la instalación del Observatorio nacional contra la trata de personas es un paso muy significativo en la lucha contra ese delito.

En el acto también participó Fernando García Robles, coordinador de la sección contra la trata de personas del Departamento de Seguridad Pública de la Organización de Estados Americanos (OEA), quien dijo que la globalización, además de promover el libre comercio internacional, fomenta el abandono de niñas y niños; su temprana incorporación a fuentes de empleo precarias; el aumento de la jefatura de hogar femenina, y la inserción a edad temprana de niños y niñas al trabajo.

Subrayó que la trata de personas es considerada la tercera fuente de lucro en importancia del crimen organizado trasnacional.

En su oportunidad, Mario Luis Fuentes, director del Ceidas, sostuvo que una vez elaborado el primer diagnóstico nacional sobre la trata de personas, se puede subrayar que el gobierno mexicano ha fallado en la protección de los más vulnerables ante este crimen. Los rezagos son evidentes, el reglamento de la ley fue emitido después de cuatro exhortos realizados por el Congreso de la Unión y por la presión de numerosas ONG.

Además, la comisión intersecretarial que estipula la ley fue instalada 18 meses después de haberse promulgado el ordenamiento, y el programa nacional para combatir este delito apenas inició su elaboración y la fiscalía especializada para perseguirlo no tiene titular.

En el país, cifras conservadoras hablan de 20 mil personas que son victimizadas cada año. En materia de persecución del delito, al cierre del informe no se había dictado ninguna sentencia condenatoria y sólo se habían iniciado 24 averiguaciones previas.