El problema de la recesión económica mundial está afectando la estrategia de combate al crimen organizado en Estados Unidos y México, debido a que la gente está más preocupada por obtener empleo y satisfacer sus necesidades básicas que por colaborar con las autoridades en materia de seguridad pública, afirmó anoche el embajador estadunidense, Carlos Pascual.

Frente a estudiantes del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey campus ciudad de México, el diplomático hizo un análisis sobre el tema de la delincuencia organizada trasnacional que afecta al continente americano, principalmente en su vertiente de narcotráfico.

Al participar en el seminario Crimen organizado, pandillas y tráfico de armas, Pascual afirmó: no podemos evitar pensar en la importancia que tiene la comunidad (en cualquier estrategia anticrimen), especialmente en la actualidad, en que la recesión ha golpeado al mundo y ha complicado todas las tareas que se están haciendo. Es más difícil (vencer a la delincuencia) cuando la economía está en contracción, cuando hay menos recursos para invertir en esas cuestiones.