José Mar Flores Pereyra fue consignado como presunto responsable de los delitos de sabotaje, ataques a las vías de comunicación y privación ilegal de la libertad, luego de que el pasado miércoles supuestamente secuestró una aeronave y amenazó con hacer estallar un artefacto explosivo (que resultó falso), en el vuelo 576 de Aeroméxico, que cubría la ruta Cancún-México.

Jesucristo vive, fue lo que el predicador alcanzó a gritar antes de ser llevado de las instalaciones que la Procuraduría General de la República (PGR) posee en la delegación Azcapotzalco, rumbo al Reclusorio Oriente, donde quedó a disposición de un juez federal.

Luego, el predicador pudo ser entrevistado antes de ingresar a prisión, debido a que inicialmente las autoridades capitalinas se negaron a aceptarlo, por lo que pasó más de hora y media en la zona de aduana.

José Mar Flores fue llevado a las puertas de la prisión a bordo de una camioneta tipo van de color blanco, custodiado por una decena de elementos de la Policía Federal Ministerial. Esta vez ya no llevaba la camisa blanca con que el mismo miércoles fue presentado por la Secretaría de Seguridad Pública federal en un hangar del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Vestía ropa de color oscuro.

En medio de los cinco agentes federales que lo custodiaban de manera directa –tres atrás y uno a cada lado de él– dijo en la zona de aduana del Reclusorio Oriente: “Se viene un cataclismo tremendo. Cristo vive y volverá. Que no se preocupen mi esposa, mis hijos y mi madre; yo estoy bien. Todo está bajo control. Todo esto está en los planes de Dios. La mejor autoridad del mundo en seguridad es la mexicana. Yo nunca hubiera podido hacer esto si él (Dios) no hubiera estado de por medio. Fue el Espíritu Santo de Dios quien me dio la sabiduría, la gracia y el valor de hacer esto.

El predicador boliviano José Mar Flores durante su traslado al Reclusorio OrienteFoto Reuters

“Fue el Espíritu Santo de Dios. No cuestionen a las autoridades de Cancún. Si me hubieran detenido (de todas maneras) lo hubiera hecho; está Dios de por medio. No fue por falta de preparación: si Dios no me hubiera dado la sabiduría, nunca lo hubiera hecho.

Lo más glorioso es que yo quería anunciar. Nunca fue mi intención hacer daño. Vine a hacerles un favor porque amo a México. Lo hubiera querido hacer mejor todavía, pero bendigo a Dios porque él hace las cosas como tiene el plan.

Apenas un par de minutos pudo hablar el pastor con representantes de los medios de comunicación mientras las autoridades del Distrito Federal lo aceptaban como interno, pues los agentes que lo llevaban custodiado ya no le permitieron decir nada.

Retraso en ingreso al penal

La Subsecretaría del Sistema Penitenciario del Gobierno capitalino informó que a las 14:15 horas, José Mar Flores Pereyra ingresó al Reclusorio Preventivo Varonil Oriente.

Fuentes de la dependencia confirmaron que fue la Secretaría de Gobierno del Distrito Federal, a cargo de José Ángel Ávila, la que negoció con las autoridades federales el ingreso, pues hacía falta un oficio judicial para concretar el ordenamiento.

Se informó que a Flores Pereyra se le aplicarán estudios para determinar su perfil criminológico, y con base en los resultados se determinará si se propone su trasladado a una institución de otras características.

Con información de Agustín Salgado