París, 14 de septiembre. Cuanto entró por las puertas de Lehman Brothers, en Londres, el francés Edouard d’Archimbaud, licenciado en matemáticas e informática, pensó que estaba a punto de empezar una gran carrera en finanzas.

Sorprendido al ver una multitud de policías, personal y periodistas frente al edificio de Lehman, el banco inversor estadunidense, cuando llegó para su primer día de trabajo el 15 de septiembre de 2008, no se dio cuenta hasta que entró de lo que había ocurrido: “Entré en el edificio y fue al mirar el Financial Times como recibí la noticia”, recordó d’Archimbaud en una entrevista a Reuters Television.

Me di cuenta de que había algunas personas de PriceWaterhouseCoopers. Estaban allí para asumir el mando de Lehman Brothers. Por eso me di cuenta de que era el final, de que todo el mundo estaba despedido, comentó. La notica ya había sacudido los mercados y minado la confianza en los bancos.

D’Archimbaud se quedó una semana en Londres, mientras empezaba a hacerse público el caos y la sorpresa en torno a la bancarrota de Lehman. Después de pasar casi un año en París trabajando en Cheuvreux, unidad del banco francés Credit Agricole, dice que está empezando una nueva vida al ayudar a empresas a recortar gastos y evitar la quiebra.

Hace unas semanas decidió trabajar a tiempo completo en una empresa que ha montado con unos amigos y que ofrece un software para que las empresas puedan predecir sus ventas y ahorrar dinero. De algún modo ayudamos a las empresas a correr menos riesgos, comentó d’Archimbaud, quien aún tiene fresca su experiencia con Lehman.