Reafirma el presidente Álvaro Uribe la permanencia de Colombia en la Unasur
Venezuela estudia la posibilidad de derribar los aviones del narcotráfico, advierte Hugo Chávez
Viernes 18 de septiembre de 2009, p. 29
Asunción, 17 de septiembre. El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, rechazó hoy la presencia de 500 militares estadunidenses en el país prevista para 2010, en el contexto del programa de ejercicios de tropas Nuevos Horizontes, al considerar que no es conveniente en un escenario regional marcado por controversias sobre seguridad.
No es un rechazo categórico. Simplemente no creemos conveniente que el Comando Sur de Estados Unidos esté presente en Paraguay con 500 efectivos para este tipo de ejercicios
, afirmó el mandatario en conferencia de prensa. Sin embargo, aclaró que este rechazo no abarca otras operaciones de este programa que tienen objetivos humanitarios
.
La embajadora estadunidense en Asunción, Liliana Ayalde, lamentó la medida. Es una decisión lamentable, pero la respetamos
, señaló al confirmar que recibió la notificación del gobierno paraguayo sobre la negativa de participar en el ejercicio militar. Esperemos que esto no sea un indicio de rechazo al resto de nuestros programas. No tenemos nada que así lo indique
, subrayó.
Ayalde explicó que Nuevos Horizontes es un programa humanitario que abarca atención médica y odontológica a poblaciones pobres en el interior de Paraguay, además de la construcción de escuelas y puestos de salud, y la capacitación de militares paraguayos. Estimó que con la decisión oficial se suspenderían unas 19 mil consultas médicas previstas con personas de escasos recursos.
El presidente Lugo explicó que el nuevo escenario generado por la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) en términos de defensa, seguridad y soberanía apuesta por la integración regional en primer lugar
.
El mandatario señaló que en la reunión de ministros de Relaciones Exteriores y Defensa de los 12 países de la Unasur, el martes en Quito, fue muy cuestionada la gran presencia de soldados estadunidenses en bases militares de la región
, en alusión al acuerdo que permitirá a Estados Unidos usar siete bases militares en Colombia.
Un despliegue de 500 personas, militares y profesionales dentro del país, no pasa desapercibido. Por eso creo que no sería prudente ni conveniente
el arribo de las tropas estadunidenses a Paraguay, insistió Lugo, al recordar que un programa similar del gobierno de Nicanor Duarte Frutos (2003-2008) desató críticas de repudio a una eventual base militar estadunidense en Paraguay.
El canciller paraguayo, Héctor Lacognata, dijo que la decisión no entorpecerá el desarrollo de otros 30 convenios existentes con Estados Unidos en diversos sectores, de los cuales seis de ellos corresponden al área militar.
En tanto, el presidente colombiano Álvaro Uribe reafirmó la presencia de su país en la Unasur, y que su gobierno tendrá mucha paciencia
dentro de ese mecanismo, en una declaración que parece corregir al ministro de Defensa Gabriel Silva, quien ayer advirtió que Colombia no descartaba retirarse del organismo regional si su agenda seguía siendo el tema de las siete bases militares.
Mientras, se informó que Colombia tomó el control de cinco radares militares que eran operados por Estados Unidos en el contexto de un acuerdo de seguridad suscrito en 1989 para combatir el narcotráfico, dio a conocer el Ministerio de Defensa colombiano.
Los radares se ubican en las localidades de Riohacha, en la isla caribeña de San Andrés (norte), San José del Guaviare, Tres Esquinas (sur) y Marandúa (este).
El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, dijo confiar en que la Unasur podrá resolver las tensiones con Colombia, tras lo que se ha interpretado como fracaso de la reunión del Consejo de Defensa Sudamericano en Quito cuando se abordaron temas sensibles de defensa en la región.
En Quito, Estados Unidos informó que este viernes entregará a Ecuador el Puesto de Operaciones Avanzadas (FOL, por sus siglas en inglés) en el puerto de Manta, cuya base utilizó Washington durante los últimos 10 años para operaciones aéreas antidrogas.
Una fuente de la embajada dijo que la devolución de las instalaciones quedará plasmado con la firma de un documento entre ambos países, después de que el gobierno del presidente Rafael Correa decidió poner fin a este acuerdo en julio de 2008, al rechazar la presencia de una base militar extranjera en su territorio y establecer su prohibición en la Constitución nacional.
Venezuela calificó como cínica e inmoral
la acusación estadunidense de que ha incumplido sus compromisos internacionales en la lucha contra las drogas, al rechazar el informe anual en la materia emitido la víspera por el Departamento de Estado.
El ministro venezolano del Interior y Justicia, Tarek el Aissami, dijo que resulta paradójico un pronunciamiento que proviene del mayor consumidor mundial de drogas y el principal productor de supermarihuana, sustancia modificada genéticamente.
Señaló que Estados Unidos está tan involucrado en el problema que si que si fuera a combatir el blanqueo de capitales su sistema financiero colapsaría.
Al cierre de esta edición, el presidente Hugo Chávez dijo que está estudiando derribar aviones del narcotráfico que atraviesen el espacio aéreo venezolano, un día después que Estados Unidos acusara a su gobierno de no hacer lo suficiente para combatir ese delito.