El vocero de la Procuraduría General de la República (PGR), Ricardo Nájera Herrera, señaló que la acusación del gobierno mexicano contra Zhenli Ye Gon sigue firme, y en nada afecta que las autoridades de Estados Unidos hayan decidido devolverle los bienes y el dinero que le habían decomisado en ese país.

Por su parte, la defensa del empresario de origen chino afirmó que las autoridades mexicanas no podrán sostener durante mucho tiempo sus acusaciones.

Nájera Herrera declaró a La Jornada que una vez que se resuelva la extradición del empresario a México, la cual será en breve tiempo, sostuvo, las autoridades nacionales decidirán si solicitan el decomiso de los bienes que Zhenli posee en Estados Unidos.

El miércoles pasado el gobierno estadunidense anunció que devolverá 1.7 millones de dólares, así como propiedades y vehículos, a Zhenli Ye Gon, después que autoridades de ese país determinaron que no será sometido a juicio por delitos contra la salud.

En ese contexto, Nájera Herrera declaró que “la PGR ya tiene en proceso la aplicación del tratado de extradición entre México y Estados Unidos. No tenemos ninguna dificultad que afecte los procedimientos que realizan las autoridades mexicanas ni tampoco los bienes que nuestro gobierno aseguró.

“Todo sigue el camino acordado entre México y Estados Unidos, ya que se acordó que se apoyaría el asunto más sólido jurídicamente y ese caso sería con el que se iba a trabajar.

Por eso, no es que Estados Unidos se haya desistido (de aplicar acción penal), sino que ya no se aportaron más pruebas para que se apoyara el proceso penal que existe en México, indicó.

Precisó que la liberación de recursos a Zhenli Ye Gon en nada impacta las acciones de las autoridades mexicanas; incluso manifestó que no se debe olvidar que en México se realizó un decomiso de varios millones de dólares (205 millones, en marzo de 2007), y éste ya se convirtió en patrimonio de la nación, porque se realizaron todas las medidas jurídicas necesarias.

Por otra parte, los abogados de Zhenli Ye Gon aseguraron vía telefónica a este diario que la PGR no podrá sostener por mucho tiempo sus acusaciones, ya que carece de pruebas contundentes para demostrar que hubo tráfico de sustancias sicotrópicas y lavado de dinero.

Un as bajo la manga

Los litigantes estadunidenses Manuel Retureta y Eduardo Balarezo, así como el mexicano Rogelio de la Garza, aseguraron que tienen un as jurídico bajo la manga, que usarán para evitar la extradición de su cliente a México.

La extradición es improcedente porque no se cumplen todos los requisitos del tratado de extradición firmado entre México y Estados Unidos, respecto de la existencia clara de un delito tipificado como tal en el código penal del país requirente, dijeron Retureta y Balarezo.

De la Garza agregó que México solicitó (la extradición de) al señor Zhenli Ye Gon por actos de tráfico de seudoefedrina (introducción de sicotrópicos de Estados Unidos a México), cuando el Congreso de la Unión aún no ha dado su aval para incluir en el Código Penal que esa sustancia forma parte del catálogo de sustancias consideradas sicotrópicas por la Ley General de Salud.

Agrgegó que “aun si no consiguiéramos frenar la extradición, tenemos pruebas suficientes para demostrar ante jueces mexicanos que lo que Zhenli importó, y que las autoridades policíacas decomisaron a finales de 2006 (unas 20 toneladas) en el puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán, no era seudoefedrina.

Este equipo de defensores está seguro que también el gobierno mexicano, en su debido momento, va tener que devolverle sus bienes a Zhenli, los cuales “aún forman parte de la materia de un delito (lavado de dinero) en estudio, por lo que el numerario incautado tiene forzosamente que estar a disposición del juez de la causa y no de la Federación… y si ésta ya se lo gastó (el dinero), tendrá que reponerlo”, sostuvo De la Garza.