El Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados convocó al Revolucionario Institucional (PRI) a no vacilar y oponerse al 2 por ciento de IVA disfrazado en alimentos, medicinas, servicios y bienes de consumo.

La postura del sol azteca se presentó una vez que la presidenta del tricolor, Beatriz Paredes Rangel, afirmó que en su bancada todavía no hay definiciones sobre esa propuesta específica del presidente Felipe Calderón.

Por separado, Josefina Vázquez Mota, coordinadora de los diputados panistas, afirmó que ha llegado el momento de tomar decisiones trascendentes. Algunas de ellas implican costos, fundamentalmente para la clase política, pero hay que dar respuestas a los ciudadanos. El país no puede esperar más.

En entrevista, el perredista Jesús Zambrano Grijalva, vicepresidente de la mesa directiva, denunció que el PRI aún no se decide a actuar en congruencia con su discurso de que está en favor de los pobres porque está sujeto a presiones de los grupos de interés.

Agregó que los gobernadores comenzaron a apretar a los diputados de sus entidades para que acepten el impuesto adicional de 2 por ciento, ante la promesa que el martes hizo el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, de transferir a los estados, vía participaciones, 57 mil millones provenientes de lo recaudado por ese gravamen.

Los gobernadores se están dejando llevar por la zanahoria que les puso Carstens enfrente para tener un poco más de recursos para sus propios manejos. Esperaría, en cambio, que el PRI deje de lado las complicidades que durante muchos años tuvieron con los sectores que protege la Secretaría de Hacienda, aseveró.

En respuesta, Francisco Rojas Gutiérrez, coordinador del PRI, aseguró que su partido asumirá lo que sea necesario en beneficio del país, pero acotó que los priístas defenderán sus puntos de vista y su propia concepción sobre el desarrollo del país.

Rojas convocó al gobierno de Calderón y al PAN a dejar atrás los clichés de las reformas estructurales y, en cambio, irlas desmenuzando y presentar iniciativas concretas. Cuando hablemos de reforma energética, hay que hacerlo, pero ¿sobre qué? ¿Qué es la reforma energética? Porque hablar en términos genéricos no dice absolutamente nada. Que se ponga en blanco y negro y nos digan qué pretenden.

Cuestionó que Calderón vuelva a hablar de reforma energética, cuando el año pasado ya se aprobaron modificaciones al régimen legal de Petróleos Mexicanos.

A unos cuantos meses, aun cuando esa reforma todavía no está en vigor en sus componentes aprobados por la 60 Legislatura, ¡ya están planeando otra reforma energética! Y lo mismo la laboral y la del Estado. Pero necesitamos iniciativas y sobre ellas discutiremos, no sobre clichés de los que todo mundo habla y nadie sabe qué son.