En la red de aeropuertos del país se reforzarán las medidas de seguridad para prevenir contingencias como las presentadas en el Distrito Federal en un vuelo procedente de Cancún, Quintana Roo, y la estación Balderas de la línea 3 del Metro, esto al margen de las revisiones extras que realizan algunas aerolíneas comerciales, informaron autoridades del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).

Funcionarios del gobierno federal –que solicitaron omitir sus nombres– indicaron que se revisa el modelo de seguridad de la terminal aérea capitalina, porque éste será el esquema base a aplicar en el resto de los aeropuertos internacionales y locales del país.

Manifestaron que la actuación de los cuerpos de seguridad durante el supuesto secuestro –el pasado miércoles 9 de este mes– de una aeronave comercial procedente de Cancún, Quintana Roo, se desarrolló conforme al plan de emergencia dispuesto para el AICM.

Así fue como se atendió la emergencia. Sin embargo, por cuestiones superiores, muy superiores, (luego del incidente) se pidió incrementar la vigilancia, lo cual pronto ocurrirá, apuntaron.

Detallaron que la secretaría coordina las reuniones del comité de seguridad del aeropuerto, en el que además de representantes de cuerpos policiacos federales y locales, participan aerolíneas y grupos aeroportuarios del país.

En la reunión de la semana pasada funcionarios precisaron que la decisión de rediseñar el esquema de seguridad fue porque se detectó que, durante la contingencia por la presunta amenaza de bomba en un vuelo de Aeroméxico, una cosa se indica en los manuales de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y otra la que se aplica.

Señalaron que por el momento ha quedado a criterio de las aerolíneas comerciales incrementar las medidas de seguridad durante el registro de equipaje documentado de los usuarios de vuelos nacionales e internacionales.

Indicaron, por otra parte, que aún no se activa la alerta sanitaria para contrarrestar el rebrote de influenza A/H1N1 en la principal terminal aérea del país, aunque las medidas iniciadas luego de la pandemia de abril se mantienen con la operación de 13 cámaras térmicas en el inmueble federal.