Berlín, 6 de octubre. El Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) descartaron que se haya superado la crisis, pese a las señales recientes sobre un nuevo curso económico. El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, advirtió que el desempleo se mantendrá al alza en muchos países en 2010, sobre todo en los de bajos ingresos. Por su parte, el director del BM, Robert Zoellick, señaló que con el aumento de la pobreza a nivel global se presentarán hasta 59 millones de desempleados más y calculó que a finales del año habrá unos 90 millones de personas en pobreza extrema.

Ambos funcionarios hicieron estos señalamientos durante la reunión de dos días en Estambul, en cuyo contexto se produjeron intensos enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes.

Strauss-Kahn recalcó que la recuperación de la economía mundial es lenta y que el nivel de endeudamiento se percibirá por algún tiempo. Agregó que es probable que los efectos negativos sobre el desempleo sean prolongados.

Durante la reunión en Estambul, que comienza su sesión de clausura, Strauss-Kahn se manifestó en favor de continuar la cooperación global que ha contribuido a alcanzar estabilidad en tiempos de crisis.

El BM aumentará en al menos 3 por ciento el peso de los países emergentes en la institución, lo que les dará 47 por ciento del voto. Zoellick hizo un llamado para que, luego del aumento del derecho de voto a 47 por ciento que se busca para los países emergentes que forman parte de ese organismo, a futuro se considere incrementarlo a 50 por ciento. Subrayó que el sistema internacional necesita un Banco Mundial que refleje la situación económica del siglo XXI. Los países congregados en el Grupo de los 24 exigen seis puntos porcentuales más.

El presidente del FMI se manifestó una vez más en favor de un mandato más amplio para su organización, que abarque todo el ámbito de políticas macroeconómicas y del sector financiero que influyan en la estabilidad mundial. Destacó que hasta enero de 2011 deberá contarse con una decisión fija respecto al previsto incremento de 5 por ciento de la cuota de derecho de voto para países con baja representación.

Subrayó que un mandato de mayor amplitud es necesario en una era en la que existen flujos de capital de gran magnitud que se mueven a alta velocidad, y que pueden llegar a cualquier rincón del mundo. Agregó que la crisis actual no tiene mucha relación con las áreas tradicionales del Fondo, como son las balanzas de pagos y los movimientos de cursos cambiarios.

En la asamblea anual de Estambul, que concluye este miércoles, también se abordó el tema de las estrategias a seguir una vez que concluya la crisis económica global.

Pide China arreglar sistema monetario

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, pidió al FMI que aplique una vigilancia rigurosa para detectar nuevas burbujas de inversiones y mantener las políticas cambiarias de los países en línea con las metas del G-20 para reajustar la economía global.

En comentarios preparados para presentar en los encuentros anuales del FMI y el Banco Mundial, Geithner dijo que el Fondo tenía que ayudar a vigilar las políticas económicas y cambiarias entre el Grupo de los 20 países industrializados y en vías de desarrollo. El FMI tendrá que decir la verdad, agregó Geithner.

Por su parte, China dijo que el FMI debe arreglar los defectos intrínsecos del sistema monetario mundial. El FMI debería apuntar a proveer un escenario monetario estable para el crecimiento global y la estabilidad financiera, declaró el ministro chino de Finanzas, Xie Xuren, ante sus pares en los encuentros semianuales del Fondo y el Banco Mundial. Xie no especificó qué tipo de reformas deseaba China, pero sus comentarios dejaron en claro que el gigante asiático está insatisfecho con la situación volátil de los tipos de cambio más allá de sus fronteras.

Debemos escuchar a quienes protestan

Un muerto y más de 100 detenidos es el resultado de la arremetida de la policía turca contra activistas, la mayoría jóvenes, que se manifestaron contra la reunión anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).

El cuerpo policiaco, equipado con vehículos blindados, disparó gases lacrimógenos y usó cañones lanzadores de agua en momentos en que la protesta se acercaba a la plaza Taksim.

En la sesión oficial de inauguración, adentro del edificio donde sesionó la asamblea anual del FMI y el BM también se dieron manifestaciones pacíficas, aunque en el contexto de un fuerte dispositivo de seguridad. Allí, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, expresó: Debemos escuchar también a quienes protestan.

La persona fallecida fue identificada como Ishak Kavlo, quien, según los primeros reportes, sufrió un ataque cardiaco cuando la policía reprimió la marcha pacífica en la avenida peatonal Istiklal, donde dispersó a los inconformes con potentes chorros de agua.

Policías antidisturbios armados con escudos lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes en la plaza Taksim, a unos cientos de metros de donde se realizaban las reuniones del FMI y el Banco Mundial. Viva la libertad, FMI, váyanse de nuestra ciudad, Haz que el capitalismo pase a la historia, El Banco Mundial es un criminal medioambiental y FMI fuera de Turquía, gritaban los manifestantes.

La policía detuvo a alrededor de 100 personas, algunas por arrojar cocteles molotov cerca del centro de convenciones donde ministros de finanzas, presidentes de bancos centrales y economistas se reunían para discutir la economía global, reportó un canal de televisión local.

Los manifestantes se concentraron en entradas de hoteles y tiendas, restregándose los ojos a causa de los gases arrojados por la policía antidisturbios. Algunos se cubrían el rostro con pañuelos rojos. El principal paseo peatonal de la ciudad estaba vacío, luego de que la gente huyó para evitar verse involucrada en los choques.

La plaza principal y las calles adyacentes volvieron a la normalidad hacia el mediodía, pese a que la policía seguía persiguiendo a pequeños grupos de manifestantes, que aparentemente eran casi todos turcos, en calles laterales.

Las protestas fueron organizadas por varios sindicatos turcos. Varias vidrieras de bancos fueron destruidas. Más tarde, la policía dejó salir al personal y a los clientes de una sucursal bancaria, donde habían estado escondidos en el primer piso del edificio. Las pantallas de los cajeros automáticos de varias entidades también fueron destrozadas.

Un significativo número de estudiantes turcos se oponen al FMI, que ayudó al país a salir de una profunda crisis financiera en 2001. Turquía y el FMI están negociando un posible nuevo acuerdo de préstamo después de que el último venció hace más de un año.