Del ciento por ciento del agua que reciben a diario las viviendas del Distrito Federal, sólo 5 por ciento se usa para beber, pues 40 por ciento se va por los excusados, 30 por ciento se gasta en las regaderas, 15 por ciento en el lavado de ropa y 6 por ciento en los trastes, precisa un estudio de los investigadores Felipe Neri Rodríguez y Miguel Rivas.

El texto se incluye en el libro El reto: primero el agua, editado por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), en el que los dos especialistas detallan que sólo 40 por ciento de los retretes instalados en las casas cumplen con la norma de utilizar seis litros por descarga, y el resto consumen una cantidad alta de líquido.

Ambos investigadores del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, y Miguel Rivas, también del Laboratorio de Ciencias de la Tierra del IPN, consideran que el problema del agua tiene origen en una falta de cultura de ahorro, lo que hace necesario una campaña de educación a todos los niveles para su cuidado, o bien un esquema de tarifas diferenciado para que pague más el que más tiene o más consuma.

Mencionan en su documento que en México 84 de cada cien viviendas cuentan con agua entubada, y una de las mayores coberturas que en este punto se tienen a escala nacional es la del Distrito Federal, pues 96.9 por ciento de la población cuenta con este servicio, por lo que es fundamental que en los domicilios se realicen acciones para su cuidado y no se pierda en los retretes.

Es necesario que las casas cuenten con tecnologías apropiadas que permitan descargas diferenciadas y reducidas, pero también se requieren mecanismos ahorradores en regaderas, llaves de lavabos y grifos, explican.

A la par, comentan que se requiere un amplio y profundo programa de educación para lograr una verdadera cultura del agua, que no es lo mismo que campañas de ¡Ciérrale! o de Gota a gota el agua se agota.