En sólo seis años se duplicó el consumo de cocaína en el país, al pasar de 1.4 a 2.5 por ciento en promedio, aunque en Tamaulipas y Quintana Roo la prevalencia es de 6 puntos porcentuales. En general, unas 429 mil personas son adictas a alguna sustancia ilícita, reveló la Encuesta Nacional de Adicciones 2008, presentada ayer.

El uso de estupefacientes aumentó 20 por ciento en la zona centro y más de 50 en el sur, indica el estudio, que por primera vez recopiló información específica de las entidades federativas, comentó María Elena Medina Mora, directora del Instituto Nacional de Siquiatría Ramón de la Fuente. Dijo que entre 2002 y 2008 el uso de inhalables aumentó de 0.4 a 0.7 por ciento. En sondeos anteriores se había observado un descenso, señaló.

Respecto al tabaquismo, el subsecretario de Salud, Mauricio Hernández, comentó que se registró un descenso en el mismo periodo, al pasar de 26.4 por ciento a 20.4. Dijo que México está en un momento de crecimiento lento de las adicciones en general, por debajo de uno por ciento en promedio registrado en los pasados seis años. Sin embargo –señaló–, al desglosar los datos se observan los incrementos mencionados, principalmente en el consumo de cocaína. Medina Mora mencionó que en 1988 había un usuario de cocaína por nueve de mariguana, y para 2008 la relación fue de uno por 1.84.

El acto donde se presentó la encuesta fue encabezado por el secretario de Salud, José Angel Córdova Villalobos, quien reconoció el retraso en la difusión del documento, el cual –dijo– estaba listo desde finales del primer trimestre del año, pero debido a la influenza A/H1N1 y luego el proceso electoral, no se pudo dar a conocer.

Los resultados preliminares de la investigación se hicieron públicos en septiembre de 2008, y se suponía que el documento final se presentaría en noviembre de ese año. Algunos asistentes al acto de ayer comentaron que también influyó en el retraso la pretensión de que el presidente Felipe Calderón asistiera a la presentación de la encuesta, lo cual no ocurrió.

De los hallazgos del sondeo, Medina Mora señaló que a pesar del incremento en el consumo de drogas ilegales, el principal problema de adicción en México es el alcohol. El patrón nacional de consumo es el más alto entre los países del continente americano, con 4.2 millones de alcohólicos que requieren de ayuda especializada. Otros 4.8 millones de individuos reportan síntomas del problema pero carecen de diagnóstico de dependencia, y 13.4 millones más se ubican en un alto nivel de consumo.

Por lo general, la ingesta de bebidas alcohólicas es en grandes cantidades por cada ocasión, en lo que sobresale la situación de las adolescentes, de las cuales, 7.1 por ciento consume altas cantidades, contra 11 por ciento de los varones.

La diferencia no es muy marcada, a diferencia de lo que ocurre en edades posteriores: 45 por ciento de los hombres de 18 a 65 años reportó beber en demasía, contra 16.8 por ciento de las mujeres. Este dato sugiere que la dependencia al alcohol es un trastorno reciente en el sector femenino, indicó la especialista.

Respecto a los factores que influyen en el elevado consumo de bebidas embriagantes, Medina Mora recordó que 40 a 60 por ciento de esta adicción es heredada, además de que hay una sobreoferta de este tipo de productos, en particular de cerveza, la cual es la bebida de mayor elección.

Los estados con mayor abuso y dependencia del alcohol entre las personas de 12 a 65 años son Nayarit (9.9 por ciento), Querétaro (8.7), Zacatecas (8.5), Morelos (8.4) y Campeche (8). Le siguen Aguascalientes, Michoacán, Puebla, Quintana Roo, Hidalgo, Tamaulipas, San Luis Potosí, Durango y Guerrero.

Con los más bajos niveles de consumo están Baja California, Guanajuato, Chiapas, Colima, Yucatán, Coahuila, Chihuahua, Sonora, Sinaloa y Nuevo León. El resto de las entidades se ubica alrededor del promedio nacional.

En cuanto a las drogas ilegales, Medina Mora comentó que la edad promedio de inicio es entre 14 y 15 años. La media nacional es de 5.2 por ciento, mientras en Tamaulipas es de 10.3 y en Quintana Roo de 10.1. Las entidades que reportan los menores niveles de consumo son Chiapas, Tlaxcala, Colima, Veracruz, San Luis Potosí, Coahuila y Oaxaca.

La encuesta se realizó en 52 mil hogares y con personas de entre 12 y 65 años. Su aplicación y análisis estuvo a cargo de los institutos nacionales de Salud Pública y Siquiatría.