Los Ángeles, 17 de octubre. Una cinta de terror de bajo presupuesto está arrasando en las taquillas estadunidenses: toda una lección para los actores, productores y otros profesionales de los blockbusters con presupuestos astronómicos, que no son los únicos que conectan con el público.

En una era en que las producciones medias de Hollywood están por encima de los 100 millones de dólares, Paranormal Activity, la opera prima de Oren Peli, fue filmada en su propia casa con menos de 15 mil dólares. Y eso es menos de lo que muchos productores gastan en sus presupuestos semanales de champán.

Sin embargo, la cinta embolsó casi 8 millones de dólares el pasado fin de semana, aunque sólo salió con 159 copias, y se prevé que las ventas de taquilla se eleven mucho más en cuanto se proyecte en más cines.

Gran parte de su éxito podría estar en la innovadora campaña de Paramount, que utiliza redes sociales como Facebook y Twitter para impulsar las recomendaciones boca a boca. Además, la película ha sido muy alabada por nada menos que Steven Spielberg, quien se hizo con los derechos del filme antes de que su Dreamworks Studio se separara de Paramount.

Enmarcada en el género found-footage (películas construidas a partir de otras, al estilo The Blair Witch Project), Paranormal Activity pretende estar grabada en formato amateur por una joven pareja que coloca una cámara en su dormitorio para intentar averiguar la causa de los extraños ruidos que escuchan durante la noche.

Al contrario de otras películas de terror, no hay nada gore, apenas aparece sangre en la cinta.

Peli, nacido en Israel, subraya que nada que se pueda mostrar con efectos especiales o CGI da tanto miedo como la imaginación. Sólo es la fuerza de lo invisible. Y podría estar justo a tu lado, señaló.

Peli no estudió cine, pero ejerció de creador de videojuegos y esa experiencia narrativa le permite manipular al público con poca más que una sombra o una puerta que se mueve lentamente.

Spielberg, quien demostró sus habilidades para dar miedo en filmes como Poltergeist o Jaws, rindió homenaje a la visión de Peli y dijo en USA Today que la primera noche que vio la película se asustó tanto que tuvo que parar y terminarla a la luz del día.

“Lo que hace Oren tan brillante –y sádicamente– en esta película es su acumulación de pequeños acontecimientos”, afirmó Spielberg.

Eso crea un leve ardor, de modo que cuando ocurre algo sorprendente, se multiplica el impacto sobre el espectador. No se apresura en los sustos, sino que se toma su tiempo. Ése es el elixir mágico que hace aterradora la película.

Paramount decidió maximizar ese efecto lanzando la película en sesiones de media noche en un puñado de ciudades universitarias. Cuando el boca a boca se difundió por Internet, los estudios dispusieron un sitio para que potenciales espectadores pidieran que se proyectara el filme en su ciudad. Y así, el fin de semana pasado se vio en 40 ciudades.

Paramount prometió que lanzaría la cinta en todo el país una vez que un millón de personas lo pidiera, y esa cifra se alcanzó el sábado.

Hasta ahora, los espectadores temblaron y se rieron, aplaudieron y se encogieron de miedo, chillaron y maldijeron mientras la pareja de San Diego intentaba combatir la hostil presencia en su dormitorio. Y Hollywood ha tomado nota de sus reacciones.

Paramount ha dado a Peli un presupuesto de cinco millones de dólares para su próxima cinta, Área 51. También con estructura narrativa found footage, contará la historia de tres adolescentes cuya curiosidad los lleva a la notoria Área 51, en la base aérea de Nellis, en el desierto de Nevada, donde a menudo se divisaron presuntos aliens.

Ahora, los fans de Peli esperan que el dinero no lo cambie. “Es increíble lo que hizo en Paranormal Activity”, dijo el estudiante de comunicación audiovisual Max Henderson. Sé que sólo era ficción, pero el miedo me duró días.