Lunes 19 de octubre de 2009, p. 8
La Iglesia católica en el Distrito Federal dijo estar “preocupada” por las más de 40 mil fuentes de empleo que se perdieron con el decreto presidencial de extinción de Luz y Fuerza del Centro, y pidió al gobierno federal “busque la forma de poder emplear a la gran mayoría” de los trabajadores electricistas afectados.
El vocero de la Arquidiócesis de México, Hugo Valdemar, cuestionado sobre si para la Iglesia católica el creciente desempleo y cierres de empresas representan un riesgo de problema social en el país, declaró: “por supuesto que hay un peligro cuando se pierde sustento fundamental de las familias”.