El sindicato que agrupa a académicos y trabajadores del Colegio de Bachilleres (Colbach) inició en los primeros minutos de ayer una huelga en los 20 planteles del sistema en la ciudad de México, en demanda de incremento salarial de 20 por ciento y por violaciones al contrato colectivo de trabajo.

La dirigencia sindical responsabilizó a las autoridades educativas del paro de labores y las afectaciones a la comunidad estudiantil, calculada en 100 mil alumnos, debido a que, dijo, la institución ha sido omisa a sus demandas. La huelga fue emplazada desde el 1º de octubre; sin embargo, en las cuatro reuniones que sostuvieron las partes en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), la Secretaría de Educación Pública (SEP) no presentó ni una sola propuesta de solución ni en el paquete económico ni en el tema de resarcir las violaciones, denunció.

Ahí señalamos que nosotros estamos en la mejor disposición de continuar el diálogo, pero hasta el momento ni la STPS ni el colegio han hecho contacto con nosotros. Mañana se reunirá el comité general huelga para valorar y elaborar un plan de acción, a fin de presionar al Colegio de Bachilleres para que presente una propuesta de inmediato.

Como parte del movimiento de huelga, en el plantel número 5 del Colbach, localizado en el fraccionamiento Bellavista, en Tlalnepantla, estado de México, al menos 30 profesores instalaron desde ayer guardias en el exterior del inmueble, al sumarse a la huelga laboral de la institución. Los académicos colocaron banderas rojinegras, distribuyeron volantes, en los cuales exigen el cumplimiento de convenios asentados en el contrato colectivo en 2008 y pusieron en operación un rol de guardias. Cientos de estudiantes tuvieron que regresar a casa tras el cierre de su casa de estudios.

Mientras tanto, el subsecretario de Educación Media Superior de la SEP, Miguel Székely Pardo, manifestó que definirá su postura oficial dentro del lapso con el que cuenta, que es de 72 horas.

Informó que están garantizadas las clases para los estudiantes afectados por el paro de labores, quienes recibirán diversas tareas a distancia por Internet y precisó que el gobierno federal no puede otorgar el aumento que demandan los trabajadores en huelga.

Entrevistado luego de la presentación del programa Mejores prácticas en el Programa ConstrúyeT, dijo que la SEP está abierta al diálogo con los trabajadores que estallaron la huelga y que el presupuesto autorizado por la Cámara de Diputados, 112 millones de pesos, ya está etiquetado para una homologación, pero no un incremento.

“El país muy claramente tiene los márgenes ya de restricción presupuestal y de crecimiento económico, que dejan ver que cualquier aumento de sueldo tendrá que ser, lamentablemente este año, más discreto, porque simplemente no se cuenta con los recursos para absorberlo.

El aumentar los salarios para el colegio o para cualquier otro subsistema del nivel medio superior de una proporción mayor a la que la economía puede soportar, lo que va a implicar es menos becas, menos formación de docentes, menos inversión en infraestructura e incluso puede poner en entredicho la capacidad del sistema para seguir financiando la operación de los planteles, afirmó.

Romualdo Escudero Carrillo, secretario general del sindicato, señaló en entrevista que sus 3 mil agremiados determinaron en referéndum –celebrado los pasados 15 y 16 de este mes– el estallamiento de la huelga por violaciones al contrato colectivo. Además de que está pendiente un segundo emplazamiento, ése sí de incremento salarial, para el próximo día 26.

La huelga es por violaciones al contrato. Contiene la aplicación del programa de nivelación salarial y demandamos que se cumplan los convenios firmados en noviembre de 2007 y diciembre de 2008.