El sector privado manifestó su absoluto rechazo al paquete fiscal aprobado por la Cámara de Diputados. Una oleada de críticas en contra de los nuevos impuestos fue desatada ayer por importantes representantes empresariales. En términos generales, se consideró que las medidas aprobadas no resuelven los problemas estructurales; desincentivan la inversión y la generación de empleos, además de que se castiga a quienes cumplen con el pago de sus impuestos y se premia a los evasores.

Para el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Ricardo González Sada, es aberrante e inconstitucional la persistencia de los diputados en mantener el carácter retroactivo del régimen de consolidación fiscal. Es totalmente aberrante la violación al estado de derecho. No se vale cambiar las reglas del juego hacia atrás. Es una verdadera sorpresa que los señores del Poder Legislativo estén legislando en contra de las garantías que nos da la propia Constitución, clamó el líder patronal, y advirtió que si eso no se corrige en el Senado, los empresarios recurrirán al amparo.

El país ya no está de moda, asegura Grupo Alfa

En ese sentido, Dionisio Garza Medina, presidente del consejo de administración del poderoso grupo Alfa, dijo que el país ya no está de moda para atraer inversión extranjera. México está cayendo estrepitosamente del interés de los inversionistas mundiales. (Hace) 15 o 20 años estábamos de moda, era el país ejemplo. Ya no, señaló.

En su momento, Daniel Servitje, director de grupo Bimbo, acusó de que el verdadero obstáculo para el país son las élites que lo gobiernan, quienes lo hacen bajo paradigmas obsoletos y no están a la altura de lo que se está haciendo en otras naciones. Creo que ya tenemos una crisis en ciernes, particularmente con la desaparición del superávit petrolero. Tenemos que abrir el camino con nuestros propios medios y encontrar incentivos que orillen a los políticos a tomar decisiones diferentes a las que ahora han tomado, sentenció.

Por su parte, el líder de los industriales de la transformación agrupados en la Canacintra, Miguel Marón, puntualizó que lo aprobado por los diputados castiga a quien cumple con el pago de impuestos y premia a los evasores; adelgaza la industria y el comercio formal, mientras engorda la burocracia y la economía ilegal.

En tanto, el presidente del comercio organizado, la Concanaco, Mario Sánchez Ruiz, manifestó su decepción y frustración por el dictamen de ley de ingresos y señaló que atenta principalmente contra las micro, pequeñas y medianas empresas. Lamentó la miopía de los legisladores, a quienes acusó de estar temerosos de asumir costos políticos, porque volvieron a aprobar una miscelánea fiscal repleta de parches.

Como coladera

Sobre el mismo tema el presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Robles Miaja, consideró que la estrategia recaudatoria tiene muchos agujeros, aunque opinó que el aumento en el impuesto al valor agregado (IVA) va por el camino correcto, porque un punto de ese gravamen en la tasa de interés no pinta.

Pero Gonzalo Núñez, gerente del Colegio Nacional de Economistas, y Roberto Galván, presidente de la consultoría Vanguardia Investment, fueron más críticos: es inevitable que el alza de impuestos aumente la inflación, la informalidad y el desempleo, advirtieron.

Además, denunciaron que el gobierno obtendrá ingresos extraordinarios por partida doble para cubrir el famoso hueco financiero, ya que tradicionalmente se calcula el precio del barril de petróleo muy por debajo de la realidad.

El panorama de las finanzas públicas para el próximo año, con la partida que obtendrán las autoridades de las exportaciones del crudo, no es negro ni gris, mientras con el aumento de impuestos se corre el riesgo de aumentar el número de empresas que dejen de pagar impuestos y opten por la informalidad, indicó a su vez Iván Franco, consultor económico ex director de la empresa Consultores Internacionales.

Los especialistas criticaron que el paquete económico para 2010 tuviera como único objetivo dotar de más recursos al gobierno federal para mantener el gasto corriente, en lugar de aumentar la inversión en infraestructura y actividades productivas para ayudar al país a salir de la recesión económica.

“El gobierno quiere más recursos para mantener un gasto perfectamente improductivo, porque de 3.2 billones de pesos que considera el presupuesto federal, sólo 100 mil millones se destinarán a inversión y el resto es para el abultadísimo gasto corriente y a fin de mantener el status quo. Para nada beneficia a la población”, puntualizó Gonzalo Núñez.

Se mantienen privilegios para los grandes corporativos

Cuestionó también que se hayan dejado “intocados“ los privilegios fiscales para los grandes corporativos, ya que los cambios que aprobaron diputados del PAN y del PRI sobre la consolidación fiscal son graduales y tibios, mientras el aumento del IVA de 15 a 16 por ciento afectará a toda la población y derivará en mayor inflación, que es otra forma de impuesto para las clases más pobres.

Por su parte, el presidente de la Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), Luis Pazos, ex diputado panista, calificó el aumento en los gravámenes de parche fiscal y acusó a otras legislaturas del actual brete económico por no haber concretado las reformas estructurales.

Mientras tanto, analistas del grupo financiero Ixe afirmaron que con el paquete fiscal los problemas estructurales no se resuelven del todo, aunque en la parte inflacionaria este paquete luce con menos presiones.

En tanto, Banamex Citigroup enfocó sus cuestionamientos en los cálculos de ingresos derivados del petróleo y consideró que establecer un precio de 59 dólares por barril, contra 53.90 de la propuesta, fue un riesgo innecesario de parte del Legislativo.

(Con información de Juan Carlos Miranda y Notimex)