Lagos, 27 de octubre. México resucitó en el Mundial Sub-17 de futbol de Nigeria con valioso triunfo de 1-0 sobre Brasil, en la segunda jornada del grupo B del torneo, en el que se recuperó del revés ante Suiza (2-0) y apeló al espíritu de Lima 2005 para ganar.

El Tri juvenil se rencontró con la verdeamarelha por primera vez luego del triunfo en la final de la edición de Perú 2005, que fue de 3-0, para conseguir en aquella ocasión el primer título en un Mundial de futbol para México. Los sudamericanos no pudieron cobrarse la revancha y complicaron su camino a octavos de final.

Suiza, que derrotó 4-3 a Japón, se mantiene invicto y garantiza su presencia en la primera fase, mientras brasileños y mexicanos están igualados con tres puntos, en plena pelea por la clasificación, en la que el cuadro asiático, siguiente rival del Tricolor, este viernes, marcha último sin puntos.

En acciones del sector A, considerado el grupo de la muerte, Argentina selló su pase a octavos de final con triunfo de 2-1 sobre Alemania, y el anfitrión Nigeria le complicó la clasificación a Honduras, tras vencerlo 1-0.

En la cancha del estadio Teslim Balogun, en Lagos, el salvador del cuadro mexicano fue Miguel Basulto, quien aprovechó una falta de entendimiento entre Joao Pedro y Alisson, para prender la pelota y anotar el gol de la victoria, al minuto 70.

El triunfo permite al Tri soñar con reditar la hazaña de la llamada generación de oro, la de Carlos Vela y Giovani dos Santos hace cuatro años, y devuelve la ilusión a un grupo que quedó tocado en el ánimo tras el primer tropiezo.

Hoy parece que el equipo hace un partido perfecto ante un rival complicado y candidato al título, pero definitivamente esto es sólo una muestra de lo que puede hacer este plantel, expresó en conferencia de prensa el técnico mexicano, José Luis González China.

Esto aún no termina y contra Japón esperamos mejorar un poco más, afirmó, y comentó que contra Suiza “los muchachos resintieron un poquito la inauguración del Mundial. El nerviosismo afectó un poquito su rendimiento y se cometieron algunos errores, pero yo estaba seguro y consciente de que ese no era el verdadero nivel de nuestra selección y que en este partido se iban a reponer muchísmo.

“No podía satanizar a mis jugadores, simplemente fue una mala tarde y hoy quedó claro que este conjunto puede dar más y jugar mejor.

Para este partido se requería jugar perfecto. Brasil siempre lo hace bien y tiene grandes jugadores. Hoy México tuvo un buen juego, con gran concentración. Defensivamente hicimos un partido perfecto y esa es la manera como debe jugársele a los brasileños.

En el encuentro, los favoritos sudamericanos no pudieron desplegar su futbol habitual y fallaron en los últimos metros, mientras México supo controlar la situación, desbaratar los planes de su adversario y asestar un golpe mortal en un momento decisivo.

La verdeamarelha arrancó bien, con Gerson en el comienzo del choque y la conexión Coutinho-Neymar funcionando como en el anterior duelo frente a Japón, pero los mexicanos fueron de menos a más y terminaron inquietando los dominios de Alisson.

Carlos Campos tuvo una buena ocasión, al minuto 18. En la segunda mitad, Wellington, promesa del Fluminense, revitalizó el juego de los suyos, aunque Campos volvió a avisar, con un lanzamiento de falta que el guardameta brasileño desvió con la punta de los dedos.