Escándalo en el IMSS: Cerón y Jáuregui se tambalean
rabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) asignados al Centro Médico Siglo XXI fotocopiaron y pegaron en todos los ámbitos de ese nosocomio el Desfiladero del sábado anterior, que denunció las relaciones de complicidad y latrocinio entre el coordinador de las Unidades Médicas de Altas Especialidades (UMAE), doctor Alfonso Alberto Cerón Hernández, y el director general de Cardiología, doctor Ricardo Jáuregui.
Ante el revuelo que provocó la difusión de la noticia, el director general del IMSS, Daniel Karam, llamó a cuentas a ambos especialistas y les exigió una explicación rotunda y convincente. Las eminencias médicas arguyeron que todo lo aquí señalado –la remodelación de una sala para pacientes trasplantados, que fue terminada de construir en 2002 y que permaneció cerrada, sin estrenarse, hasta febrero de este año, cuando Jáuregui ordenó destruirla para reconstruirla y llevarse una jugosa tajada por la obra, así como la adquisición de monitores telemétricos en 300 mil pesos cada uno, cuando su precio en el mercado es de 100 mil– es falso y que por lo tanto iban a desmentir al autor de esta columna.
Insatisfecho con su respuesta, Karam les pidió que, antes de comparecer ante la opinión pública para lavar su honra, le demostraran que lo señalado aquí es contrario a la verdad, cosa que no hicieron. De acuerdo con fuentes que volvieron a pedir el anonimato al transmitir esta información, tanto Cerón como Jáuregui y su equipo de colaboradores –especialmente el director médico, Rodolfo Herrera Franco, y el director administrativo, Antonio González– van a ser sometidos a una auditoría.
En caso de que ésta se efectúe, quienes la lleven a cabo tendrán que revisar las facturas de los dos monitores telemétricos marca Shimadzu, cuyos números de serie son F-000-449 y F-000-443, actualmente en servicio en el área de Hemodinamia. También deberán examinar con detenimiento el contrato que Cardiología celebró con la empresa de seguridad Brespi, que nunca ha cumplido con lo pactado en ese documento, pero que forma parte de la red de corrupción que opera allá adentro.
Y ya encarrerados, los auditores tendrán que mirar con atención cinco contratos de servicios temporales, en los cuales aparece falsificada la firma del doctor Rubén Argüero Sánchez, antecesor de Jáuregui en la dirección general de Cardiología, como consta en pruebas grafoscópicas que obran en poder de La Jornada. Tras la tragedia de la guardería ABC, que el IMSS subrogó a familiares de Margarita Zavala, esposa de Felipe Calderón, en la cual perdieron la vida 49 niños sin que la justicia tocara a ninguno de los culpables, Karam lo último que desea es un nuevo escándalo en el instituto a su cargo. Sin embargo, el cúmulo de presuntas irregularidades en que habrían incurrido sus subordinados en el Centro Médico Siglo XXI, y el descontento de los trabajadores que solicitan la intervención de la justicia para poner fin al saqueo, podrían detonar un conflicto mayor la próxima semana, ya que el doctor Jáuregui amenazó con reprimir a aquellos que sigan pegando denuncias contra él en los muros del recinto hospitalario.
Ebrard y la gasolinera de Tlalpan
Quien, por su parte, no ha dicho esta boca es mía, es el jefe del Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, pues permanece impasible ante las protestas de los vecinos de Tlalpan que se oponen a la construcción de una gasolinera –que viola todos los reglamentos vigentes– en la avenida Insurgentes Sur 4097. Hoy, a partir de la una de la tarde, los inconformes realizarán una nueva manifestación pública después de hacer un mitin frente a las oficinas del delegado perredista Higinio Chávez.
Impuestos: la nueva nobleza nativa
A lo largo de la semana, una cibernauta llamada Patricia Gutiérrez-Otero distribuyó por Internet un sencillo análisis que demuestra las consecuencias prácticas que el paquete fiscal aprobado por el PRIAN tendrá sobre la economía de los asalariados que ganan más de 10 mil 600 pesos al mes y que, por tanto, sufrirán el aumento de 28 a 30 por ciento en el impuesto sobre la renta (ISR) y, como todos los mexicanos, de 15 a 16 por ciento en el impuesto al valor agregado (IVA).
“Si actualmente ganas 12 mil pesos al mes –ejemplifica Gutiérrez-Otero– y te quitan 28 por ciento de ISR, es decir, 3 mil 360 pesos, te quedarán 8 mil 640, pero a partir del año próximo, el descuento será de 3 mil 600, por lo que te dejarán libres 8 mil 400, o sea, 240 pesos menos que hoy. Por lo tanto, el incremento de 2 puntos porcentuales al ISR equivale a un decremento de 2.77 por ciento de tu salario”.
Ahora bien –prosigue Patricia–, suponiendo que el resto de tu sueldo (8 mil 640 pesos hoy) lo uses únicamente para comprar productos gravados con IVA, perderás mil 296 pesos más pagando la tasa de 15 por ciento, por lo que tu poder adquisitivo real será de 7 mil 344 pesos, pero cuando el IVA aumente a 16 por ciento, en enero, y te quiten mil 344 pesos, te quedarán para gastar 7 mil 56 pesos, o sea, 288 menos que hoy
.
Así, concluye la cibernauta, de un ingreso mensual de 12 mil pesos, el fisco te despoja hoy de 4 mil 656 por ISR e IVA, pero desde enero te arrancará 4 mil 944, una suma equivalente a 41.20 por ciento de lo que ganas. En otras palabras, de cada peso que cobres sólo serán tuyos 58.80 centavos
. Y eso, finaliza, si no tienes televisión por cable ni teléfono fijo ni celular, porque en tal caso Hacienda te robará 3 por ciento más de tu sueldo por cada uno de esos servicios
.
En cambio, de acuerdo con diversos analistas económicos, los privilegios de la alta burocracia ascenderán en promedio 9 por ciento, mientras los recursos destinados a la educación disminuirán 8 por ciento. Por su parte, los grandes empresarios sólo cubrirán (tal vez) 25 por ciento de su adeudo de 453 mil millones de pesos por impuestos diferidos, y quienes se apoderen, gracias a Calderón, de la red de fibra óptica de Luz y Fuerza del Centro y de los hilos de fibra oscura de la Comisión Federal de Electricidad para dar servicio de triple play (televisión, telefonía e Internet) no aportarán nada al fisco durante los dos primeros años.
En 1998, cuando el gobierno
de Ernesto Zedillo y los diputados del PRI y del PAN (que en ese momento dirigía Calderón) aprobaron la conversión de la deuda privada de los banqueros en deuda pública, es decir, en deuda de todos los mexicanos, el país retrocedió a la Edad Media: surgió una nueva nobleza a la que 100 millones de siervos nos veremos obligados a rendir tributos, por lo menos hasta el día en que los nietos de nuestros nietos empiecen a ser abuelos.
La veracidad de estas afirmaciones puede comprobarse en las páginas de revistas especializadas como Hola, Quién, Caras y otras, cuyas páginas retratan en papel de lujo y con derroche de colores las bodas, los bautizos, los aniversarios y las fiestas de esa nueva nobleza que viste, calza, come, viaja y se divierte incansablemente con la máxima elegancia, gracias a nuestra miseria, a nuestra desdicha sin esperanzas de cambio y a nuestra esclavitud.
Por eso habrá que mantenerse atentos a las movilizaciones que el Sindicato Mexicano de Electricistas encabezará el día 11, al frente de diversas organizaciones gremiales y ciudadanas, contra el decreto que extinguió Luz y Fuerza del Centro para despojarla de su red de mil 100 kilómetros de fibra óptica y regalársela a nuestros amos.