Hay seis detenidos; ombudsman mexiquense inicia investigación
Jueves 12 de noviembre de 2009, p. 33
Toluca, Méx., 11 de noviembre. Dos policías de la Secretaría de Seguridad Pública federal están entre las cuatro personas que la noche del martes fueron rescatadas de ser linchadas por miles de habitantes de Cuijingo, municipio de Juchitepec, porque presumiblemente se dedicaban al secuestro y a la extorsión, informó hoy la Procuraduría General de Justicia del estado de México (PGJEM).
Las cuatro personas y dos presuntos cómplices fueron detenidos y rinden declaración ante el Ministerio Público del fuero común, que inició el expediente TOL/SPILDO/302/09 para deslindar responsabilidades sobre el secuestro del empresario chalquense José Trinidad Sánchez Rosas, que motivó la movilización tanto de los pobladores como de la Agencia de la Seguridad Estatal (ASE) para impedir el linchamiento.
La PGJEM informó que los presuntos raptores son José Ricardo Velázquez Escárcega, un policía federal adscrito a la Unidad para el Restablecimiento del Orden Público, y su compañero Juan Carlos Ortega Vaca, además de Gonzalo Galicia Delgado, Óscar Hernández Sandoval, José Luis López Gutiérrez y Juan Antonio León Martínez.
La dependencia advirtió que nadie puede hacer justicia por su propia mano
, en referencia a que una turba intentó prender fuego a cuatro de los seis acusados.
Después de un recorrido por esta comunidad, visitadores de la Comisión de Derechos Humanos del estado de México (Codhem) iniciaron una queja relacionada con estos hechos y abrieron el expediente LP/ 1090/2009.
Gregorio Duarte, tercer visitador de la Codhem, dijo que aunque habitantes que participaron en los disturbios no señalaron a una autoridad, se investigará el actuar de funcionarios de la Secretaría de Gobierno, la PGJEM, la ASE y el ayuntamiento de Juchitepec. También se investigará el clima de inseguridad que, según la población, fue el origen de la violencia
, precisó.
Habitantes de Cuijingo advirtieron que al próximo delincuente que capturen no saldrá vivo
del poblado. Argumentaron que todos forman un pueblo unido
que está dispuesto hacerse justicia
ante el incremento de la incidencia de delitos en esta región mexiquense colindante con el estado de Morelos.