266 años de cárcel a ex judiciales secuestradores

El juez 56 penal condenó a 266 años de cárcel a dos ex policías judiciales quienes fueron encontrados culpables de secuestro en agravio de un empresario, dueño de dos casas de cambio en la ciudad de México. Los hechos ocurrieron en febrero, cuando Jesús Villalobos Olea y Luis Gabriel Jop Corzo sometieron con armas de fuego a la víctima, quien conducía su automóvil por avenida Tláhuac y La Turba, colonia La Conchita, en compañía de su hija y su nieta, a quienes subieron a una camioneta Voyager, en la cual los trasladaron a una casa de seguridad. Momentos después llevaron al empresario a las casas de cambio para que recolectara dinero para el rescate. Los ex policías fueron detenidos cuando salían de Plaza Zapamundi, ubicada en Canal de Miramontes, colonia Cipreses. De acuerdo con la PGJDF, Jop Corzo y Villalobos Olea habían sido separados de la corporación en 2007 y 2008, respectivamente.

Amplían arraigo a Valentina de Albornoz

El juez primero penal concedió a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) una ampliación de 10 días del arraigo contra Blanca Isabel Valentina de Albornoz, con el fin de ampliar la investigación que se le sigue por los delitos de lesiones, fraude y asociación delictuosa. Fuentes de la dependencia señalaron que luego de este periodo se definirá la situación jurídica de la mujer, contra quien pesan 21 denuncias penales, una de la cantante Alejandra Guzmán, por las lesiones que les ocasionaron los tratamientos estéticos a los que sometieron en sus clínicas. Al señalar que el plazo empezará a correr hoy, confiaron en que Valentina de Albornoz será consignada, toda vez que algunas víctimas presentan lesiones irreversibles, como deformaciones y amputaciones.

Desmienten que ejecutado fuera mando de la SIEDO

El hombre asesinado la noche del miércoles en la colonia Asturias tenía antecedentes penales por delitos contra la salud, informó el fiscal de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal PGJDF, Joel Alfredo Díaz Escobar, quien aclaró que la víctima, identificada como Jorge Javier Hernández Padilla, no era agente de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la Procuraduría General de la República, como la familia afirmó y la misma víctima se ostentaba. Se trata, dijo el funcionario, de un abogado en materia de bienes raíces que aparentemente, un día antes de su ejecución estuvo detenido por posesión de drogas, mismo delito por el que estuvo preso hace dos años.