Al acoso social, mediático, gubernamental y hasta bancario que padecen los trabajadores de Luz y Fuerza del Centro (LFC) se suma otro estigma: empresas privadas e instituciones públicas les niegan empleo en cuanto informan sobre su procedencia laboral.

Así lo denunciaron varios electricistas, mientras hacían fila en el centro de reclamaciones del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE). Refirieron su experiencia personal en empresas como Femsa (embotelladora de Coca-Cola) y Bimbo, y en las filas de la policía del estado de México. Ustedes tenían sindicato en LFC, es el argumento que les dan para negarles el empleo. ¡Como si les fuéramos a contaminar a la gente, relataron.

La desesperación y el sentimiento de ser objeto de burla por parte del gobierno federal cunde entre los trabajadores de Luz y Fuerza del Centro, sobre todo cuando para cualquier reclamación por adeudos salariales en la declarada como extinguida se les exige haber cobrado previamente el finiquito. Una vez acreditada tal condición y otros papeles, se les pide hablar, dentro de dos o tres semanas, al teléfono 5723-1305, para ver cómo va el trámite.

Guillermo Reyes, quien laboraba en subestaciones, resume: Primero emprendieron una campaña para que la sociedad nos culpara de todos los problemas con sus instalaciones y cobros por la luz. Luego desaparecieron la empresa y han lanzado en contra nuestra a los locutores de la televisión y la radio. Además, el gobierno ha hecho creer que nos estamos llevando una millonada por las liquidaciones, cuando no hay quien esté conforme con el cálculo del finiquito, pues al que no le restaron años lo bajaron de categoría salarial, o ambas cosas. Tenemos además a los bancos en un franco acoso para que les dejemos nuestro dinero y finalmente nos tienen boletinados en muchas empresas donde, aunque cubramos el perfil laboral que solicitan, sólo por proceder de LFC no nos contratan.

Ese sumario es escuchado en la fila por otro trabajador, quien de inmediato tercia: Yo fui a Banamex a cobrar la semana 41. En cuanto pasé a la ventanilla, antes de pagarme me derivaron con un ejecutivo de cuenta, quien me sometió a un interrogatorio para saber qué había hecho con el dinero de mi liquidación y persuadirme para depositarlo con ellos. En cuanto a lo laboral, uno de los compañeros de Guillermo Reyes denuncia indignado la doble cara del gobierno federal: Lo de la recontratación es una vacilada, lo mismo que las famosas franquicias. Pero al mismo tiempo sabemos que existen contra nosotros cartas de desrecomendación sólo por haber estado en Luz y Fuerza del Centro.

Como desde el primer día, el fantasma de lo ocurrido en 1995, cuando la desaparición de Ruta 100, ronda a los electricistas. Conocedores de esa experiencia muchos terminan tomando la decisión de tomar su finiquito.

Ayer, sin embargo, la presencia en los centros de liquidación continuó escasa e irregular, con varias horas donde prácticamente no había solicitantes y otras donde, de un momento a otro, llegaban a formarse no más de diez.

Entre ellos llegó a Puente de Piedra Jesús Serrano, quien hasta ayer logró obtener un documento oficial de identificación, porque todos los que tenía se quedaron en su centro de trabajo de donde nadie ha podido, un mes después, recuperar sus objetos personales.

Los liquidados

El Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) informó que este sábado concluye el plazo para que los trabajadores de Luz y Fuerza del Centro firmen sus convenios de finiquito y reciban una compensación adicional a lo que les correspondería en términos de la Ley Federal del Trabajo y el contrato colectivo de trabajo.

Durante la víspera, dijo el organismo, el número total de integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas que habían optado por el finiquito sumó 25 mil 544, lo que representa 57.4 por ciento del total de la planta laboral. De esta forma, en el penúltimo día del plazo, 18 mil 967 electricistas se mantienen reacios a aceptar las condiciones gubernamentales y buscan revertir el decreto presidencial que los dejó sin empleo al extinguir Luz y Fuerza del Centro.

(De la redacción)