Monterrey, NL, 14 de noviembre. El Morelia falló en su intento de ubicarse como líder general del torneo Apertura 2009, al empatar 1-1 ante Monterrey, que por su parte está a la espera de lo que hagan este domingo América y Santos para definir su posición rumbo a la liguilla.

Monarcas se quedó con 33 puntos, por 35 del Toluca, mientras los Rayados llegaron a 30 unidades, ambos equipos ya clasificados con anticipación.

El encuentro realizado en el Tecnológico fue de regular nivel, con mucha lucha en media cancha y pareció que los equipos no se esforzaron a fondo para cuidar sus elementos rumbo a las finales.

Monterrey salió con más decisión en los primeros minutos y tuvo dos llegadas por conducto de Walter Ayoví, quien se tardó y su tiro fue tapado por Wilson Tiago, y un disparo de Aldo de Nigris que fue directamente a las manos de Moisés Muñoz.

De Nigris tuvo su recompensa al minuto 9, cuando el ecuatoriano Ayoví robó el balón y le dio pase por el centro para que anotara el 1-1 con tiro rasante ante un solitario guardameta.

Juan Carlos Medina pudo aumentar el marcador al 18, pero su tiro-centro pasó por el área chica y nadie pudo empujar el balón a las redes.

Monarcas salió de su letargo luego de 20 minutos de juego, cuando se decidió a atacar, sobre todo el chileno Hugo Droguett.

El 1-1 llegó al minuto 34, en un centro por la izquierda de Miguel Sabah a segundo palo, donde Elías Hernández llegó sin marca y punteó el balón que el portero Jonathan Orozco alcanzó a tocar, pero no impidió la anotación.

Luis Pérez estuvo cerca de recobrar la ventaja para los Rayados, al 35, cuando recibió el balón cerca del manchón penal, luego de una gran acción de Ayoví, pero mandó un tiro elevado. Lucho fue relevado para el complemento, por lesión, y su sitio fue ocupado por Humberto Suazo.

El árbitro Mauricio Morales se equivocó al minuto 64, cuando marcó tiro libre y no penal en una jugada en la que De Nigris recibió una patada en el rostro dentro del área.

Monterrey tuvo el dominio en el complemento, pero la jugada de mayor peligro fue para el equipo de Tomás Boy. Al 77, Droguett aprovechó que Felipe Baloy no pudo cortar un largo centro y mandó un tiro bombeado que pasó cerca del travesaño.