El director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACM), Ramón Aguirre, informó que hoy se regularizará el suministro de agua del tanque La Caldera, el cual surte a 300 mil habitantes de ocho colonias de Iztapalapa, al concluir la Comisión Nacional del Agua (Conagua) los trabajos de reparación del acueducto ramal Tláhuac.

En la presentación de resultados de los proyectos desarrollados en el Centro Virtual de Cambio Climático de la Ciudad de México, Aguirreseñaló que, aun cuando ese sistema no está a su cargo, se envió personal, equipo y accesorios para agilizar su reparación, pues se carece de una fuente alterna de abastecimiento en la zona oriente de la demarcación, donde habitantes de las colonias Santa Martha Acatitla, San Miguel Teotongo y Ermita Zaragoza carecieron totalmente del líquido, mientras en algunos puntos de Tláhuac sólo se redujo el flujo.

La capacidad del tanque La Caldera, que se abastece de 39 pozos, se vio anteriormente mermada, pues en lugar de recibir 700 litros por segundo se redujo hasta 200 en algún momento, aunque ya se está cerca de los 500 litros por segundo, y se analiza con la Conagua la posibilidad de apoyarlos con la reubicación de algunos pozos en proceso de reposición para satisfacer la demanda de servicio en la zona, indicó.

Los riesgos de que otras zonas de la ciudad resulten afectadas por una ruptura o falla en los sistemas que surten de líquido al valle de México es latente, porque son tuberías viejas de concreto preforzado o asbesto, en las que por movimientos de la propia dinámica de la ciudad se producen algunas fugas, pero confiamos en que no sucedan de manera frecuente, pues existen zonas, como las abastecidas por el acueducto ramal Tláhuac, donde no hay otra alternativa para dar el servicio más que con pipas. Y hacerlo en un área amplia es un problema, agregó.

La crisis en materia de agua, sin embargo, no está superada, pues los niveles de las presas están en el punto más bajo en un 17 de noviembre, con déficit de 45 millones de metros cúbicos, por lo cual se mantendrá hasta finales de enero un recorte diario en el suministro de 30 por ciento, y se harán suspensiones mayores algunos fines de semana, para realizar reparaciones en las líneas de suministro y garantizar que todos los tubos sean reparados por la Conagua, añadió.

Mencionó que después de esa fecha se analizará de manera conjunta la posibilidad de que el corte sea de 15 a 20 por ciento, lo cual dependerá del abastecimiento, la demanda y el almacenamiento, pues tenemos que garantizar que el agua nos aguante todo el primer semestre de 2010, y tener algo de agua para dar el servicio.