Con el argumento de poner orden tras los escándalos que protagonizaron los propios diputados en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), la presidenta de la Comisión de Gobierno, Alejandra Barrales, impuso el llamado corral de la ignominia a los reporteros que cubren la fuente informativa.

Desde ayer se tomó la decisión de ubicar a los comunicadores en los balcones del recinto e impedirles el paso al salón de plenos, a pesar de un compromiso previo de no limitar su labor periodística.

Barrales justificó que se trata de un acuerdo de la Comisión de Gobierno signado por todos los coordinadores parlamentarios para que las sesiones se desarrollen sin ninguna interrupción. No se puede tener a diputados en la tribuna con temas trascendentes y que se les esté quitando la atención por otras labores, declaró.

Sin embargo, en el citado acuerdo, cuya copia posee este diario, se consigna que se designarán balcones para uso exclusivo de los periodistas, sin que ello limite su desplazamiento por el salón de plenos.

Consultada al respecto, la coordinadora del PAN, Mariana Gómez del Campo, dijo que firmó el documento para poner orden en el recinto, pero –aseguró– no tenía conocimiento de una corraleta.

Se comprometió a revisar el asunto, con la intención de que puedan realizar su trabajo y no se sientan atropellados.

El vocero de la bancada del PRD, Alejandro Sánchez, rechazó esta medida tras señalar que en ningún momento hubo una reunión con el grupo parlamentario para tocar el tema, por lo que también hizo el compromiso de pedir su rectificación, a fin de que no se limite la interacción entre los reporteros y los legisladores.

Desde los escándalos protagonizados por el diputado priísta Cristian Vargas, y después con la irrupción de Emelia Hernández en el recinto legislativo para exigir al diputado del PRD Héctor Guijosa la pensión alimentaria para su hijo, el área de comunicación social entabló pláticas con los representantes de los medios para encontrar alternativas que permitieran un mayor control en el acceso del inmueble en Donceles y Allende.