Zurich, Londres y Barcelona, 20 de noviembre. La FIFA rehusó repetir el partido de clasificación para el Mundial de Sudáfrica 2010 entre Francia e Irlanda, pero tal respuesta no satisfizo a la Federación Irlandesa, que volvió a apelar, alentada por la declaración del francés Thierry Henry, quien cometió mano, lo admitió y opinó que volver a jugar sería la solución más justa.

Como se menciona claramente en los reglamentos del juego, durante los partidos las decisiones son tomadas por los árbitros y esas determinaciones son finales, dijo el organismo rector del balompié internacional en un comunicado publicado en su sitio de Internet.

El pasado miércoles Irlanda y Francia empataron en París y el gol galo de la calificación fue convertido por el defensa William Gallas, pero en la jugada previa el delantero y capitán Henry tocó el balón primero con el brazo y luego con la mano, sin ser sancionado por el silbante del encuentro, el sueco Martin Hansson.

El comunicado del delantero, quien señaló que la determinación de repetir el partido no es suya y naturalmente estoy incómodo con la manera en que ganamos y lo siento muchísimo por los irlandeses, que merecían ir a Sudáfrica, fue hecho público después de que este viernes la FIFA confirmó que no se volverá a jugar.

Tras una reunión de su consejo de administración, la federación irlandesa concluyó que debe apelar a la federación francesa para que se una a ella, así como a los capitanes de ambos equipos, Thierry Henry y Robbie Keane, para solicitar a la FIFA un nuevo duelo, que preservará la integridad del juego en todo el mundo y el orgullo de equipo nacional francés, dice el comunicado.

El llamado caso Henry saltó a la política con declaraciones en favor y en contra. La ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, se alegró por el pase a Sudáfrica, pero me parece que en circunstancias semejantes estaría bien que el partido vuelva a jugarse.

En tanto, el ex ministro de Justicia irlandés y diputado europeo, Pat Gallagher, indicó que llevaría ante el parlamento de la Unión Europea el debate sobre si hay que volver o no a jugar el partido.

Henry entrenó normalmente con su equipo Barcelona, pero se mantuvo discreto. Entró en su auto con cristales negros sin detenerse ante fotógrafos y periodistas que lo aguardaban, mientras el técnico, Josep Guardiola, aseguró que la mano fue instintiva.

Trascendió que quizá el galo no juegue ante el Athletic de Bilbao, en el choque de la fecha 11 de la liga española.