Santiago, 22 de noviembre. Ernesto Lejderman Ávalos, hijo de la mexicana María del Rosario Ávalos, asesinada en Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), decidió llevar el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en busca de justicia.

Lejderman dijo que planteó ante la CIDH la injusta medida adoptada por la justicia chilena, pues perdonó a los ex militares que mataron a mis padres al aplicar la prescripción y rebajándoles la pena a únicamente cinco años de cárcel.

Además, al Estado chileno no le interesó hacerse responsable del crimen contra su madre y su padre, el argentino Bernardo Lejderman, quienes fueron asesinados el 8 de diciembre de 1973 por agentes de Augusto Pinochet.

Los tres responsables de la doble ejecución, los ex oficiales del ejército Fernando Polanco, Luis Fernández Monje y Héctor Vallejos fueron beneficiados con una reducción de cinco años en sus penas por una resolución de la Corte Suprema de Justicia de esa nación.

El veredicto, basado en la teoría de la media prescripción del caso, revirtió un fallo de la corte de apelaciones de Santiago, que en 2007 condenó a 10 años de cárcel a los tres ex soldados por el asesinato del matrimonio Lejderman-Ávalos.