Salina Cruz, Oax., 25 de noviembre. Unos 700 taxistas y 250 choferes de autobuses urbanos de Salina Cruz y Tehuantepec suspendieron el servicio cuatro horas y bloquearon los accesos de los dos municipios en protesta por la falta de operativos policiacos y militares, que ha propiciado el incremento del robo de vehículos y asaltos a operadores, uno de los cuales fue asesinado.

Automóviles y autobuses que circulaban de Bahías de Huatulco a este puerto y viceversa quedaron varados. Estudiantes y trabajadores llegaron tarde a sus destinos.

A las ocho de la mañana los choferes arribaron con sus unidades a las explanadas de los palacios municipales y cerraron con candados las puertas para impedir la entrada a los trabajadores. Otro grupo, apoyado por choferes de camionetas de alquiler y camiones de volteo, bloqueó la circulación frente a las oficinas de la Procuraduría General de la República en Salina Cruz, y frente a la delegación de tránsito, e impidió la entrada y salida de vehículos a Tehuantepec.

Los transportistas fueron recibidos por los priístas Héctor Becerril Morales, presidente municipal de Salina Cruz, y Diego Santos Díaz, de Tehuantepec, a quienes reprocharon que no se ha cumplido la construcción de módulos de vigilancia a las entradas y salidas de esas localidades.

Los alcaldes se comprometieron a realizar las obras, y comandantes de las policías municipales, preventiva del estado y Federal, además del de la décima zona naval militar, José María Ortegón Cisneros, ofrecieron redoblar la vigilancia e instalar retenes.

José Antonio Amado Osorio, delegado regional de Gobierno, informó que Javier Córdova Quevedo y Eleazar Pacheco Ruiz, representantes de los choferes de Salina Cruz, y Tomás Álvarez y Luciano Pacheco Monroy, de Tehuantepec, acordaron con autoridades policiacas y militares reunirse este jueves para definir la estrategia para enfrentar al hampa.

Los conductores dijeron que los delincuentes no sólo asaltan a los taxistas, sino también les roban las unidades y los matan.

Recordaron que Eduardo Mendoza, un joven de 19 años, trabajador del sitio Hidalgo, en Tehuantepec, salió con pasajeros rumbo a Juchitán en el taxi 7005 la noche del viernes pasado y días después apareció muerto.