Lo ocurrido con el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) confirma que el gobierno federal busca poner el pie en el cuello al sindicalismo combativo y verdadero, porque su prioridad es terminar con las organizaciones gremiales, manifestó Engels López Barrios, integrante del Colectivo Comunista Memoria y Libertad.

Durante la celebración por el 90 aniversario de la fundación del Partido Comunista Mexicano (PCM), en el Teatro del Pueblo, donde se instaló un centro de acopio para los trabajadores de Luz y Fuerza del Centro, se criticó la embestida que ha emprendido el nefasto panismo contra la clase obrera. Asimismo, se expresó la imposibilidad de una refundación de ese instituto, que desapareció en 1981.

En entrevista, López Barrios, uno de los organizadores de la conmemoración, precisó que lo hecho al SME es un golpe muy duro para el sindicalismo mexicano. Es nefasto haber dejado en la calle a más de 40 mil trabajadores, con un plumazo dado a mala hora en medio de la crisis económica.

Precisó que el gobierno no buscó combatir eventuales irregularidades –como argumentó–, porque entonces “actuaría contra líderes charros, como Elba Esther Gordillo o Carlos Romero Deschamps”.

Acerca de la imposibilidad de refundar el PCM, López Barrios precisó que las ideas del partido siguen vigentes, pero es complicada su refundación porque las condiciones no son apropiadas en este momento. Se requeriría la participación activa de la sociedad por medio de comités de base, para lo que debería haber mucho trabajo de campo, pero faltan recursos económicos. En cuanto al registro, no creo que ahora hubiera trabas, aunque la existencia todavía del neoliberalismo acota que surja un partido comunista”.

A la celebración acudieron ex integrantes del PCM, como Antonio Becerra Gaytán; hijos de destacados militantes, como David Flores, Francisco Rosas y Rafael Olmedo, así como el ex delegado en Cuauhtémoc Jorge Legorreta.