El Gobierno del Distrito Federal distribuirá su presupuesto, de 128 mil 434 millones de pesos, en cuatro ejes prioritarios: protección del ingreso familiar, 39 mil 238.6 millones; inversión y empleo, 28 mil 886.6; procuración de justicia y seguridad pública, 27 mil 511.3, y educación, ciencia y tecnología, 7 mil 263.2, para mantener los programas de protección social y evitar que caiga la inversión en obra, como sucedió con las participaciones federales.

Por ello la necesidad de aumentar de dos a tres pesos la tarifa del Metro, pese a mantenerse un subsidio de 6 pesos por pasajero, para captar mil 400 millones de pesos que se destinarán a mantenimiento, y a nivel central realizar un ajuste al gasto corriente, con lo cual se espera tener un ahorro de mil 375 millones de pesos, explicó el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, al presentar el paquete económico para el ejercicio fiscal 2010, en el cual solicita las mismas facultades de fiscalización aprobadas a las autoridades federales.

Se trata, explicó el secretario de Finanzas, Mario Delgado Carrillo, de hacer efectivo un crédito fiscal y el importe de sus accesorios legales mediante embargos precautorios, aseguramiento de bienes como dinero, metales preciosos y depósitos bancarios; acciones, bonos, créditos de inmediato y fácil cobro; bienes inmuebles; inmovilización de depósitos bancarios, seguros o cualquier otro depósito en moneda nacional o extranjera, incluidas las aportaciones voluntarias que hayan realizado en su cuenta individual de ahorro para el retiro.

El jefe de Gobierno advirtió que, en materia económica, 2010 será un año difícil, no sólo por la crisis internacional, sino por las decisiones equivocadas que tomó el gobierno federal. La recesión es, hoy por hoy, la más grave en el continente.

Así, para contrarrestar sus efectos se solicitó un techo de deuda mayor en comparación con los de 2008 y 2009, lo cual permitirá mantener la inversión en la línea 12 del Metro –que requiere este año 8 mil 504 millones de pesos– e instrumentar un nuevo programa de austeridad en el gasto corriente. Anticipó que de no tomarse esas medidas habría un grave efecto en las finanzas del Distrito Federal, no sólo en este año, sino en los años por venir.

El aumento de un peso a la tarifa del Metro será para mantenimiento. La línea A prácticamente la tenemos que rehacer, la que corre sobre Zaragoza, porque los suelos en esa zona son blandos. Entonces, las vías del tren parece que suben y bajan, hay desviaciones, y son trabajos que no se pueden aplazar, expresó el mandatario capitalino.

La solicitud de aprobar el nuevo esquema tarifario sería para mejorar la infraestructura hidráulica en Iztapalapa, Iztacalco, Gustavo A. Madero y Coyoacán, así como la calidad y servicio que se presta a los habitantes de la ciudad, manteniéndose los beneficios fiscales a grupos vulnerables en el pago de agua y predial, aunque se reduce 16 por cento el presupuesto destinado al programa de comedores comunitarios y públicos al ubicarse en 55.5 millones de pesos, puntualizó Delgado Carrillo.

Al presentar el paquete económico ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, confió en que se generarán los consensos necesarios para enfrentar 2010 con éxito, aunque en sus intervenciones los diputados de las diferentes fracciones parlamentarias cuestionaron los mecanismos de recaudación y advirtieron que el ajuste de impuestos y tarifas debe ser más cauto. Incluso hubo quienes se pronunciaron por someter a plebiscito el incremento del boleto del Metro o el de aplicar de manera gradual el incremento.

La mayor inconformidad se generó sobre el presupuesto asignado a las delegaciones políticas, que sufrirían un recorte generalizado de 17 por ciento, y los criterios para la asignación de subsidios respecto del agua.