Preocupa el desinterés de jóvenes por obtener la credencial de elector
Jueves 3 de diciembre de 2009, p. 12
El Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE) presentó una encuesta según la cual aunque existe confianza en el desempeño de la autoridad electoral, son pocos los que creen que los diputados electos representen realmente los intereses de los ciudadanos en el Congreso. En general, 58 por ciento de los ciudadanos consideran que en la organización de los comicios el Instituto Federal Electoral (IFE) actuó con imparcialidad.
Para poco más de la mitad de los encuestados el sufragio no garantiza que los intereses del electorado estén representados en la Cámara de Diputados. Me parece que este no es un dato menor y debe llamar nuestra atención. En el mismo sentido la mayoría no están satisfechos con el funcionamiento de nuestra democracia
, aseveró el consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés.
A su vez, el consejero Marco Antonio Baños dijo que la confiabilidad del IFE entre la ciudadanía es diversa en función de los estratos de edad, destacándose el carácter más crítico de los jóvenes, como lo muestra que poco más de 400 mil ciudadanos que recién cumplieron 18 años, se hayan dejado de inscribir en el padrón. El consejero consideró que las personas que cuentan con mayor información política tienen una mayor confianza en el trabajo del IFE.
De acuerdo con el estudio, la calificación del desempeño del IFE fue de 7.6; en tanto que 80 por ciento de los ciudadanos no tuvieron problemas para encontrar su casilla; 9 de cada 10 ciudadanos no tuvieron que esperar nada para poder ejercer su voto.
Valdés aludió a la preocupación que tiene el IFE sobre la situación del padrón electoral, la credencial de elector y la posible instrumentación de la cédula de identidad, reivindicando que la credencial que emite el IFE es la idónea para la identificación de los ciudadanos.
Por su parte, Baños insistió en sus críticas hacia la pretensión de emitir una cédula de identidad, porque sería absurdo destinar en estos momentos una cantidad impresionante de recursos para construir un registro ciudadano cuando ya lo tenemos
. Por ello sostuvo que es necesario hacer un ajuste en la legislación electoral y poblacional para dejar en claro cuál será el instrumento de identidad.