Desconocido en el ámbito financiero internacional, Ernesto Cordero Arroyo tendrá como secretario de Hacienda la encomienda de remontar la que este gobierno define como la mayor crisis económica en décadas. Mientras estuvo al frente de Desarrollo Social creció la pobreza.

Amigo de Felipe Calderón desde que estudiaban la maestría en administración en el ITAM, Cordero manejará las finanzas públicas en momentos en que se le ubica como el favorito del mandatario para ser candidato presidencial panista.

Este actuario por el ITAM y maestro en Economía por la Universidad de Pensilvania delineó la mayor parte de su carrera en el servicio público a la sombra de Felipe Calderón.

Aunque públicamente el Presidente halagó ayer la amplia experiencia de su colaborador en materia económica y en políticas públicas, en el ámbito de Los Pinos se reconoce que Cordero, a diferencia de sus antecesores, no forma parte de la tecnocracia reconocida por los organismos financieros internacionales.

Su paso por Hacienda, donde fue subsecretario de Egresos, fue de apenas 13 meses, ya que en enero de 2008 entró a la Sedeso en sustitución de Beatriz Zavala.

El saldo que deja su gestión es de 6 millones de personas más en pobreza hasta 2008, más un número aún no determinado este año, así como el continuismo en los programas sociales, la mayoría de los cuales fueron establecidos durante el sexenio pasado.