El Distrito Federal es una ciudad clave en la construcción de políticas públicas dirigidas a las mujeres, con programas innovadores que han permitido avanzar en el respeto a sus derechos, pero es también el mejor ejemplo de regresión del déficit democrático de género que tiene el país, denunció la consultora en temas de género y gobiernos locales e integrante de la Red Mujer y Hábitat de América Latina, Alejandra Inés Massolo.

Al participar en el foro Construyendo y armonizando derechos para una vida plena de todas las mujeres, organizado por la Comisión de Equidad y Género de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), la investigadora advirtió el derecho al voto de las mujeres no ha garantizado por igual la posibilidad de acceder a cargos de decisión y muestra de ello son los 16 gobiernos delegacionales del DF, donde solamente en uno está al frente una mujer.

Al recordar que en administraciones delegacionales anteriores había hasta cinco delegadas, esto –apuntó– significa una regresión.

Dijo que el más reciente boletín de Ideas para el Desarrollo de las Américas (IDEAS), del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), publica la investigación Política y partidos ajenos a la igualdad, distantes de la paridad, en el que se advierte que es escasa la apertura y promoción de los liderazgos femeninos.

Este, dijo, es un llamado a los partidos políticos, particularmente a los tres más importantes, y refirió que de los 2 mil 440 municipios del país, sólo 4.6 por ciento son gobernados por mujeres: el PRD tiene 13 alcaldesas, 23 el PAN y 21 el PRI.

Antes, al inaugurar el foro, la presidenta de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Alejandra Barrales, planteó promover en el próximo periodo ordinario de sesiones una reforma penal para perseguir de oficio el delito de violencia familiar –que aplica sólo cuando la víctima es menor de edad o incapaz– y suprimir el otorgamiento del perdón al agresor.

Según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, el Distrito Federal ocupa el tercer lugar en incidencia de violencia contra las mujeres, después de los estados de México y Jalisco. Precisa que 77 de cada 100 mujeres mayores de 15 años manifestó padecer o haber padecido algún tipo de violencia, 64.6 por ciento en espacios públicos y 48.1 por ciento en sus hogares.

El documento, proporcionado por la oficina de la legisladora perredista, señala que sólo 14 por ciento de las mujeres que denuncian violencia familiar en el DF solicitan alguna medida de protección y generalmente se pide apercibir al agresor de no molestar a la víctima. Las medidas precautorias no se solicitan por falta de claridad en el Código de Procedimientos Penales del DF y falta asesoría jurídica para mujeres violentadas, advierte el informe.